Existen multitud de pruebas para detectar distintos tipos de cáncer. Pero por lo general, las pruebas que se hacen son una vez ya se está enfermo. Pero este mal es importante atajarlo cuando antes, porque así aumentan las posibilidades de supervivencia del paciente. Por eso, una prueba preventiva que pueda detectarlo en etapas muy tempranas e incluso antes sería casi una garantía de éxito en la lucha contra este problema.
Pues bien, algunos investigadores están trabajando para buscar nuevos tratamientos efectivos, vacunas, y también nuevas pruebas para su detección. Desde el uso de nanotecnología para detectar incluso cuando tan solo hay unas células cancerosas, hasta nuevos análisis que pueden prevenirlo incluso años antes.
Ten en cuenta que el diagnóstico es una parte esencial de la medicina para poder atajar los problemas. Por ello las pruebas diagnósticas son tan vitales en cualquier tipo de enfermedad.
4Nanobots contra el cáncer
También se está investigando en otras muchas tecnologías y tratamientos para poder acabar con el cáncer incluso en etapas muy tempranas cuando solo hay unas cuantas células cancerosas y sin efectos secundarios como los tratamientos actuales.
Por ejemplo, se investiga con nanobots diminutos que se pueden inyectar dentro del cuerpo humano para que viajen por el torrente sanguíneo y puedan eliminar todo aquello que sea maligno del organismo.
Eso es, por ejemplo, lo que está haciendo la Universidad de Durham en Reino Unido. Allí han usado nanobots para perforar células cancerosas. Así se pueden matar en tan solo 60 segundos, según informan los investigadores involucrados.
Por el momento está en fase experimentar, probando con microorganismos y peces pequeños, hasta pasar luego a roedores y después, si todo va bien, comenzar las pruebas clínicas para que se pueda usar finalmente en humanos. Pero de ser positivos, podría salvar millones de vidas cada año.
Estos nanobots pueden actuar de varias formas contra el cáncer. En el caso de esta investigación británica, son pequeñas moléculas que se pueden introducir en el cuerpo del paciente y son capaces de identificar las células cancerosas para unirse a ellas.
Una vez hecho eso, se activan por luz, lo que genera que una cadena de átomos como una broca comience a rotar a cierta velocidad (2 o 3 millones de veces por segundo) y así taladrar la célula cancerosa que se abrirá y morirá.
Pese a que está en sus primeras fases de investigación, los investigadores son optimistas y creen que tienen potencial para ser aplicado en distintos tipos de cáncer. Así se podría contar con un tratamiento no invasivo que sería muy efectivo.