La Asociación de Profesionales de Bodas en España (APBE) ha pedido a los gobiernos autónomicos que no incluyan estos eventos dentro de las restricciones que se les aplican a hostelería y al ocio nocturno, porque, según apuntan, tienen «características distintas».
A través de un comunicado ha mostrado su desacuerdo «con las últimas políticas y normativas que se han puesto en marcha por la pandemia y ha pedido que se ponga a fin a muchas de ellas.
Según explican, no comparten que se limite la celebración hasta la 01.00 horas, la misma hora a la que se obliga a cerrar a la hostelería, porque sus eventos tienen «características distintas». «Somos sectores diferentes», apunta el presidente de APBE, Isaac Amselem.
En este sentido, recuerda que, mientras que en las discotecas y los bares las personas pueden llegar a tener contacto con desconocidos, en las bodas los asistentes son familiares y amigos cercanos que tienen relaciones sociales incluso fuera del ámbito de la boda.
LA TRAZABILIDAD, «BAJO CONTROL»
«En este tipo de evento social, la trazabilidad está bajo control por parte de los profesionales ya que, desde los diferentes colectivos, se están tomando medidas de recopilación de datos de los asistentes a dichos eventos teniendo en cuenta la ley de protección de datos», apunta la asociación.
Según los expertos en el sector, las parejas están realizando una labor fundamental como promotores y máximos responsables del evento y están transmitiendo a sus invitados la responsabilidad de seguir las normas.
Es por eso que consideran injusta su situación y piden a los gobiernos autonómicos que les tengan en cuenta.
Se trata de un sector, según ha informado Amselem, que suma ya «más de dos millones salarios dejados de cobrar», entre panaderos, camareros, limpiadores, ayudantes de office, peluqueros, modistas, conductores de autocares, fotógrafos y otros profesionales. Esta cifra, ha indicado, aumentaría a siete millones si se cuentan los empleos indirectos.
En total, apunta, las bodas estimadas en total en España para el 2020 era 168.000 bodas y, a día de hoy, se han realizado más de 20.000, según los datos que maneja la asociación, siendo «tan solo tres de estas» las que han generado «puntuales rebrotes».
«Nos han impedido hacer de forma segura más de 130.000 bodas. Están criminalizándonos y acusándonos de algo que no es verdad», ha denunciado Amselem, antes de asegurar que el sector «no puede seguir así» porque sus trabajadores tienen «que comer».