Si vas a iniciar un negocio o ya lo tienes en marcha y necesitas ayuda, ha llegado el momento de elegir un buen socio. Pero acertar no siempre es sencillo, a veces nos dejamos guiar por los sentimientos en lugar de ser objetivos, y resulta que no siempre una familiar o un buen amigo es la persona idónea para permitirnos alcanzar el éxito con nuestro proyecto.
Uno de los errores típicos al emprender es no elegir bien el socio. Sin embargo, si te tomas el tiempo necesario y sigues los consejos que te vamos a dar, acabarás encontrando a la persona que complemente a la perfección tus habilidades personales y profesionales. Juntos podréis comenzar el camino hacia el éxito.
8Revisa el contrato periódicamente
Los negocios cambian con el tiempo y esto provoca que también las relaciones entre los socios lo hagan. Es posible que llegado un determinado momento os haga falta un nuevo perfil en vuestra sociedad para seguir creciendo, o que la relación entre tu socio y tú no haya terminado de funcionar y este prefiera abandonar el proyecto.
El inmovilismo afecta muy negativamente a todo tipo de negocios, por eso debes estar abierto a revisiones periódicas del contrato firmado originariamente. Es una estupenda forma de mantener la buena relación entre los asociados y asegurarse de que el acuerdo se adapta a la realidad del negocio en cada momento.