Si vas a iniciar un negocio o ya lo tienes en marcha y necesitas ayuda, ha llegado el momento de elegir un buen socio. Pero acertar no siempre es sencillo, a veces nos dejamos guiar por los sentimientos en lugar de ser objetivos, y resulta que no siempre una familiar o un buen amigo es la persona idónea para permitirnos alcanzar el éxito con nuestro proyecto.
Uno de los errores típicos al emprender es no elegir bien el socio. Sin embargo, si te tomas el tiempo necesario y sigues los consejos que te vamos a dar, acabarás encontrando a la persona que complemente a la perfección tus habilidades personales y profesionales. Juntos podréis comenzar el camino hacia el éxito.
7Asume tu rol de socio
No es lo mismo emprender en solitario que hacerlo en compañía. Al buscar un socio vas a tener alguien con quien compartir riesgos y preocupaciones, pero no olvides que esa persona debe estar siempre en un plano de igualdad con respecto a ti. Tu socio no es tu empleado, no lo trates como tal.
Algunos emprendedores llevan mal el desprenderse de la “paternidad” de su idea y se sienten un poco más dueños del negocio que sus socios. Esto es un grave error, porque puede hacer que ese socio que tanto te ha costado encontrar tome la determinación de abandonar el proyecto por razones personales.