Si vas a iniciar un negocio o ya lo tienes en marcha y necesitas ayuda, ha llegado el momento de elegir un buen socio. Pero acertar no siempre es sencillo, a veces nos dejamos guiar por los sentimientos en lugar de ser objetivos, y resulta que no siempre una familiar o un buen amigo es la persona idónea para permitirnos alcanzar el éxito con nuestro proyecto.
Uno de los errores típicos al emprender es no elegir bien el socio. Sin embargo, si te tomas el tiempo necesario y sigues los consejos que te vamos a dar, acabarás encontrando a la persona que complemente a la perfección tus habilidades personales y profesionales. Juntos podréis comenzar el camino hacia el éxito.
5Conoce a tu posible socio
Es fundamental que antes de comprometerte intentes conocer lo máximo posible a tu posible asociado, analizando sus niveles de madurez emocional y profesional. Procura que se trate de alguien proactivo y motivado, cuyas habilidades y capacidades puedan complementar a las tuyas. Asegúrate además de que es alguien que sabe trabajar en equipo.
Junto a la personalidad de tu posible socio, también deberías profundizar en su experiencia profesional. Mucho mejor si puedes pedir referencias o informes. La otra parte no debe ver esto como una muestra de desconfianza, sino como una manifestación de que te tomas en serio el proyecto y quieres asegurarte de contar con el socio perfecto.