Comienza la campaña de la vuelta al cole más rara y con mayor incertidumbre de todas. La pandemia ha hecho que los gobiernos tomen una serie de medidas para que los alumnos puedan regresar a las aulas sin problemas, pero como se ha visto en otros países, los colegios han tenido que volver a cerrar. El Covid-19 genera muchas dudas entre el profesorado y padres, e incluso miedo por posibles contagios.
Las CC.AA. están gestionando esto de una forma diferente. Y aunque todas están tomando medidas de precaución, es extremadamente controlar a los niños y evitar que haya contagios. Bien es cierto que entre ellos la enfermedad Covid-19 suele ser leve, pero ¿y cuando esos niños regresen a casa con sus hermanos mayores, padres o abuelos? Para más INRI, algunas comunidades aplicarán sanciones a los padres que no los lleven por miedo.
Bien es cierto que hay un derecho a la escolarización, y que en situaciones normales, si un niño no acude de forma constante, se hablará con sus tutores legales y si sigue así se toman medidas legales. Pero ¿y si se obliga a unos padres a llevar a su hijo a clase y termina en un drama familiar? Creo que hay muchas cosas que reflexionar…
9Toma de temperatura
Además de todo lo anterior, Sanidad también ha invertido dinero para todas esas medidas y se incluirá también un protocolo de toma de temperatura obligatorio.
Las familias serán las encargadas de realizar la medición todos los días antes de salir hacia el centro educativo. Si detectan algo de fiebre, entonces no deben acudir al centro.
Igual ocurre para el profesorado y demás personal del centro educativo. Tendrán que guardar cuarentena y si han mantenido contacto estrecho con algún positivo, aunque ellos no parezcan tener síntomas, deberán permanecer en aislamiento domiciliario sin poder reincorporarse.