Seguramente hasta ahora siempre venías tirando el agua donde cueces la pasta y seguirás haciéndolo. Este es un gran error que solemos cometer hasta que nos damos cuenta de que podemos darle un nuevo uso a este agua.
¿Sabías que el agua donde cueces la pasta se puede utilizar para más cosas, y además de ahorrar agua podría ser beneficiosa por los componentes que tiene? Te comentamos por qué la mejor idea es darle un nuevo uso en lugar de tirarla por el fregadero sin más. ¡Descúbrelo!
7Aprovecha el agua de cocer la pasta, pero con sentido
Es bueno que aproveches el agua, de hecho ya ves la gran cantidad de nuevas aplicaciones que puede tener. Sin embargo, debes comprobar que esté buena antes de darle un nuevo uso.
Desecha el agua cuando esté turbia, ya que solo se puede reutilizar unas pocas veces. Si haces la pasta en la misma dos veces se pondrá almidonada y demasiado espesa para volver a utilizarla. Por tanto, si el nuevo uso que les das es para hacer más pasta recuerda que llegará un momento en que no valga para ello.
Por otro lado, aunque no debes escatimar en ese sentido, utiliza solo el agua que necesitas para preparar la pasta. Solo se requiere lo suficiente para que la pasta se sumerja.
La próxima vez que hagas pasta, acuérdate de guardar el agua para alguno de los múltiples usos que te hemos comentado y que se te ocurran.