Comprar un inmueble es una de las decisiones más importantes de la vida de una persona: decidir el lugar y el tipo de casa en la que se va a vivir durante un largo plazo de tiempo no es algo que se pueda decidir a la ligera. Y a esto hay que sumar el hecho de que en la mayor parte de los casos hay que firmar una hipoteca que limitará la liquidez durante varios años.
Respecto a esto último, los trabajadores público suelen contar con importantes ventajas. Las hipotecas para funcionarios no solo se conceden más fácilmente, sino que obtienen muchas ventajas respecto a otro tipo de trabajadores.
¿Cuáles son las ventajas en las hipotecas para funcionarios y cómo conseguirlas? Estas son las claves de este tipo de hipotecas:
Hipotecas que cubren el 100% del coste de la vivienda
A principios de siglo, conseguir una hipoteca era sumamente sencillo. Se podría decir que las entidades bancarias regalaban estos contratos prácticamente a cualquier persona que se interesara por ellos.
Con la llegada de la grave crisis económica de 2008, los bancos comenzaron a poner más difícil la posibilidad de lograr una hipoteca hasta llegar al punto actual: en la mayoría de los casos, la cantidad económica prestada solo cubre el 80% del valor de tasación de la vivienda.
Esto es un problema en algunos casos. Sobre todo cuando se es joven y no se cuenta con ahorros suficientes como para poder abonar el 20% restante en efectivo.
Los funcionarios pueden, sin embargo, beneficiarse de las condiciones de la web Hipotecas 100, con un tipo de contrato con el que sí se cubre el 100% del valor de tasación del inmueble.
¿Cómo? Es sencillo: su propio contrato laboral, fijo y seguro a largo plazo, es garantía suficiente para que los bancos puedan asumir ese riesgo de ofrecer una cantidad económica más alta.
Requisitos para acceder a una hipoteca 100
El primer requisito para poder acceder a una hipoteca que cubra el total de coste de la vivienda es ser funcionario del Estado con plaza fija. Pero, más allá de eso, ¿existen otras condiciones que cumplir?
Así es. Cualquier funcionario que quiera beneficiarse de este tipo de hipotecas 100 debe demostrar que no cuenta con ningún tipo de deuda y su solvencia es suficiente para hacer frente a los pagos. Además, es preciso ofrecer garantías extra en forma de bienes o ahorros que demuestren que se podría pagar el total de lo adeudado y, en muchos casos, el banco requiere un compromiso extra con la entidad. Esto último se traduce en contratar un seguro de vida o un plan de pensiones.
Para conocer con detalle todos los requisitos, condiciones y beneficios de este tipo de planes, la mejor opción es contactar con un equipo de mediación profesional.
Estos asesores profesionales están preparados para encontrar la opción de hipoteca para funcionarios que más beneficie a sus clientes y les ofrecen la posibilidad de acompañarlos durante todo el proceso para que la hipoteca que se firme sea justa y no esconda cláusulas que puedan ser un problema en el futuro.
Con este tipo de hipotecas especiales para funcionarios los trabajadores públicos tienen todavía más cerca la posibilidad de hacerse con la casa de sus sueños.
