sábado, 23 noviembre 2024

ACS: juez y parte en el giro milmillonario de las constructoras

En 2018, el beneficio neto para las seis grandes constructoras fue de 17,4 millones de euros en el primer semestre. Al año siguiente, el despegue fue espectacular: 981,5 millones de euros. Al borde de los 1.000 millones. En 2020, y sin tener en cuenta a ACS, que presenta resultados el 14 de agosto, se puede decir aquello de nubosidad variable.

Variable porque, tres de las cinco grandes, siguen teniendo beneficios, aunque de forma bastante más moderada que en 2019. Se trata de Acciona (22 millones de euros), FCC (75,9 millones) y Sacyr (70 millones). Las otras dos, Ferrovial y OHL, continúan con los números rojos: -379 millones para la primera, y -38,5 millones, para la segunda.

ACS ya se dejó casi un 30% en el primer trimestre. Hotchrtief, su filial, ha ganado un 27% menos en el primer semestre

ACS incrementó sus beneficios en el primer semestre de 2019 un 17% respecto al mismo periodo de 2018. En concreto, alcanzaron la cifra de 523 millones de euros. De cara a 2020, podría ser un síntoma de cómo pueden ir las cosas al grupo presidido por Florentino Pérez los resultados ya confirmados de Hotchtief, la constructora alemana del grupo.

Así, Hochtief obtuvo un beneficio neto de 202,2 millones de euros en el semestre. Se trata de un 27,4% menos que en el año anterior. El impacto negativo de 18 millones de euros se debió al desplome del tráfico en Abertis. Conviene recordar que la constructora alemana tiene una participación del 20% en la empresa de autopistas.

Ya en el primer trimestre, la caída del tráfico en las autopistas de peaje supuso una reducción de 40 millones de euros al beneficio neto. El confinamiento, y las pertinentes restricciones a la movilidad impuestas en aquellos países en los que opera, fueron la causa. Si a ello unimos los resultados de Clece, la filial de servicios y limpieza, la caída de beneficios en el primer trimestre del grupo ACS fue del 28,5%: quedó en 201 millones de euros.

ACS A LA ESPERA

Si sumamos los números de las constructoras, sin contar ACS, en el primer semestre los beneficios de Acciona, FCC y Sacyr suman 167,9 millones de euros. Por el contrario, las pérdidas de Ferrovial y OHL suman 417,5 millones de euros.

La situación se repite, porque en el mismo periodo de tiempo de 2019, los grupos tuvieron resultados positivos y negativos. Así, los de Acciona, FCC y Sacyr sumaron 363 millones de euros. Por tanto, su beneficio de un año para otro se ha desinflado en 195,1 millones de euros.

En el caso de Ferrovial y OHL, las pérdidas en 2019 fueron de 21,3 millones. En 2020, y para igual periodo, han sido de 417,5 millones de euros. Dicho de otra manera, si la ecuación en 2019 daba guarismos positivos de 341,7 millones para las cinco grandes constructoras, un año después, se traduce en -249,6 millones de euros.

Habrá que esperar a los resultados de ACS para ver si esos números rojos acaban convirtiéndose en verdes. Durante el primer trimestre, la caída fue del 28,5%. Si extrapolamos este porcentaje, y lo aplicamos al resultado del primer semestre del 2019 (523 millones de euros), el beneficio podría situarse en torno a los 373 millones de euros.

De ser así, la suma del beneficio del total de las seis grandes constructoras seguiría en verde, aunque si dicho porcentaje es superior, acabaría en rojo. Y el giro dado en un año, entonces, sería espectacular. Se habrían volatilizado los casi 1.000 millones de euros de beneficio conseguidos un año antes.


- Publicidad -