La montaña rusa vital de Jorge Verstrynge no deja de despertar asombro. Y es que este controvertido politólogo anda cabizbajo porque los medios más afines ideológicamente al Gobierno central no parecen contar con sus opiniones a pesar de que él, fascista en la adolescencia, fue uno de los patrocinadores de Podemos hace lustro y pico.
El ninguneo mediático ha provocado heridas en el alma de este singular personaje, ex número dos de la ultraconservadora Alianza Popular de Manuel Fraga que evolucionó hasta defender los postulados neomarxistas de su amigo Pablo Iglesias.
EL ENFADO DE VERSTRYNGE
Verstrynge le ha contado a Rubén Arranz en Voz Pópuli que los medios ya no le llaman porque es «incómodo»: «A ver, es verdad que hace un tiempo me operaron de un cáncer de cuerda vocal, del que ya estoy recuperado. Pero otro motivo es que yo soy cómodo, la monarquía pasa por momentos muy difíciles y, por tanto, han dicho que los tíos como yo no pueden tener voz. Ésa es su forma de matar a la oposición: cortarle el ‘micro’ por un tiempo…».
El colaborador de ‘Al rojo vivo’, que quizás está deseoso de tener más presencia en La Sexta, asegura que «la monarquía española tiene un concepto patrimonial del país. Por tanto, como el país es suyo, pues todo es suyo. Por eso aprovecha todo lo que el país les puede dar, legal o ilegalmente. La monarquía española siempre ha sido corrupta y actualmente también lo es».
VERSTRYNGE APUNTA A LA CABEZA DE FELIPE VI
«Cuando Juan Carlos hace heredero a su hijo, es evidente que el hijo sabía todo. Tú no puedes hacer heredero a su hijo sin decírselo. Y, hasta que estalló el escándalo, el hijo se calló», dice el exprofesor de Pablo Iglesias.
«Ha tenido un buen escudo el hijo en su padre. Ya saldrán más cosas porque seguro que se han producido. Estoy absolutamente seguro de que Felipe VI sigue la misma senda que Juan Carlos», añade.
Y añade que «Urdangarín hizo lo que vio que se hacía en casa. Me cuesta mucho pensar que Felipe no hace lo mismo. Cuando él recibe un Ferrari o un Lamborghini de un jeque, él sabrá el porqué lo recibe. Lo mismo que lo sabía su papá».
Verstrynge dice que «un rey es alguien que tutela un país y a una población. Por tanto, tiene una exigencia de absoluta honestidad. ¿Que le gustan las mujeres y el dinero? Me alegro por él. Pero no puede robar a su propia población. Eso no tiene perdón».
UN PAÍS SIN MONÁRQUICOS
«Nadie es monárquico en España. Nadie lo ha sido nunca. Lo que pasa es que la monarquía era necesaria para mantener los privilegios y la estructura social que se habían establecido durante la época de Franco, que, a su vez, eran los anteriores a la República Española», sostiene.
Y dice que en España «ocurrió que la izquierda dijo que era ‘juancarlista’ porque estaba acojonada con la posibilidad de que se produjera un golpe de Estado y una involución. La derecha tampoco es monárquica. Lo que pasa es que este hombre (el rey) es la clave de bóveda del sistema. Si la monarquía desaparece de España, todo el tinglado se derrumba. Por lo tanto, hay monárquicos por necesidad propia, pero no lo son de corazón».
OTROS PROBLEMAS PARA EL POLITÓLOGO
No es la primera vez que Verstrynge denuncia que los medios acallan su voz. Y es que en 2018 su amigo Fernando Sánchez-Dragó escribió en El Mundo que la izquierda, «que tanto presume de pluralismo, tolerancia y libertad de expresión», le había censurado al profesor un artículo sobre inmigración.
Dragó explicaba que Verstrynge creía que sus artículos no habían sido publicados en eldiario.es por intereses de George Soros: «Todo cuadra. A Soros, Sumo Hacedor de la decadencia del mundo occidental y de la Europa buenista, entreguista y oligárquica, le interesa, como a todos los de su casta y los de su cuerda, la importación masiva de mano de obra barata.
Nacho Escolar no estaba de acuerdo con la versión del curioso tándem: «Es falso que hayamos censurado un artículo a Jorge Verstrynge. Lo ocurrido es bastante diferente a lo que se ha contado en varios medios. Hace unas semanas, Verstrynge se ofreció a publicar una serie de artículos en eldiario.es y mandó ese texto como primera propuesta».
El director de eldiario.es buscó el mentón de Verstrynge con los siguientes dardos: «Lo recibimos en la redacción y, después de leerlo, decidimos no publicarlo, igual que hacemos todos los meses con decenas de artículos que rechazamos. Optamos por no publicarlo porque nos pareció un texto demagógico y de baja calidad porque incluía datos falsos».