El banco estadounidense Goldman Sachs ha rebajado en un 91%, hasta 197 millones de dólares (167 millones de euros), el beneficio neto atribuido que declaró el pasado 15 de julio, cuando presentó sus cuentas trimestrales, debido al impacto en sus cuentas del acuerdo al que llegó con el Gobierno de Malasia para zanjar el saqueo del fondo 1MDB.
Según ha informado el banco este viernes en un comunicado remitido a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés), la entidad ha decidido incorporar un cargo extraordinario por litigios de 2.010 millones de dólares (1.701 millones de euros) en el segundo trimestre.
A finales del año pasado, el diario ‘The Wall Street Journal’ publicó que el Departamento de Justicia de Estados Unidos barajaba multar a la entidad financiera con unos 2.000 millones de dólares por la malversación del fondo 1MDB, por lo que la cantidad provisionada este viernes podría estar destinada a hacer frente ese cargo.
«La compañía está en diálogo con el Departamento de Justicia, varias autoridades reguladoras estadounidenses y varias autoridades no estadounidenses fuera de Malasia con respecto a la posible resolución de sus investigaciones y procesos», ha explicado Goldman Sachs en el comunicado remitido este viernes.
«Estos diálogos, que están liderados principalmente por el Departamento de Justicia, están progresando. No puede haber ninguna certeza de que esto lleve a una resolución de cualquiera de estos asuntos», ha alertado la entidad financiera.
ACUERDO
El pasado mes de julio, el banco estadounidense llegó a un principio de acuerdo con el Gobierno de Malasia para resolver mediante el pago de 3.900 millones de dólares (3.301 millones de euros) todos los procedimientos penales y regulatorios en el país que involucran a la entidad, incluidos los procesos penales pendientes contra sus filiales y algunos empleados actuales y anteriores en relación con la malversación de recursos del fondo 1Malaysia Development Berhad (1MDB).
El acuerdo implicaría el pago de 2.500 millones de dólares (2.116 millones de euros) al Gobierno de Malasia, así como una garantía de abono de al menos otros 1.400 millones de dólares (1.185 millones de euros) tras la venta de activos de 1MDB incautados por las autoridades de distintas partes del mundo.
A cambio de esto, las autoridades malasias aceptaron retirar todos los cargos criminales pendientes, además de acordar que no se presentarían cargos adicionales contra Goldman Sachs, sus filiales o cualquiera de sus directivos y trabajadores, con la salvedad de los exempleados Tim Leissner y Roger Ng.