Que la sanidad pública española es una de las mejores del mundo es algo que se sigue demostrando año tras año, incluso en situaciones críticas como la vivida a raíz del coronavirus. Pero por muy bien que funcione la sanidad pública muchas veces los tiempos de espera para ver a especialistas, hacerse pruebas o pasar por quirófano son tan largos que esto supone un problema para el autónomo, haciendo que sea recomendable en estos casos un seguro de salud.
Son muchos los autónomos que cubren contingencias comunes a través de seguros. Esto se debe a que su protección pública suele ser menor que la prevista para asalariados. En el caso de la atención médica todos somos iguales y todo el mundo recibe la misma atención, pero el autónomo no puede permitirse bajas laborales largas, así que recurre a la sanidad privada para poder estar listo para trabajar lo antes posible.
5Ahorro de tiempo
La tecnología ha cambiado la forma de hacer muchas cosas, incluso la forma de ir al médico. Desde hace ya algún tiempo la sanidad privada viene ofreciendo la posibilidad de hacer la consulta médica por teléfono o videollamada en aquellos casos en los que no es necesario examinar personalmente al paciente.
Para los autónomos este tipo de consultas a distancia son también una gran ventaja, puesto que se ahorran mucho tiempo al no tener que desplazarse y pasar minuto tras minuto en la sala de espera para ver a su médico para hacer una consulta que en muchos casos no dura más de 5 o 10 minutos.
Al profesional por cuenta propia lo que menos le sobra es el tiempo, por lo que cualquier medida que le ayude a ahorrarlo le viene bien. En este caso, el poder hacer consultas de forma remota y sin desplazamiento permite que los autónomos cuiden más su salud y no usen el “no tengo tiempo para ir al médico” como excusa para no cuidarse.