Sin duda, cuando hablamos de Procter & Gamble tenemos que hacerlo refiriéndonos a una historia nacida en el año 1837, que por entonces no era más que una pequeña empresa familiar de Cincinnati que supo emprender y manejar una gran huella de la que en poco tiempo estructuró William Procter para hacer algo más que jabones y velas, como en un principio, y que hoy cuenta con más de 22 marcas como Dodot, Vicks o Ariel.
A estas, destinadas hacia el cuidado del bebé, de la ropa o de la salud personal, le acompañaron otras pequeñas individuales, donde junto a las mismas de Dodot, Ariel o Vicks, se encuentran las de Pantene, Fairy, Ambi Pur o Evax. Todas ellas son de un gran reconocimiento que ha ido en aumento.
3Ganar enteros en sus beneficios
De esta forma, la empresa que se manifiesta a través de Ariel, Dodot o Vicks, entre otras de gran repercursión, llevó a cabo uno de los procesos de transformación más profundos de su historia, lo que ha repercutido en sus ganancias.
Una modificación que, sin embargo, les ha hecho ganar enteros, como se puede ver en los datos económicos de los últimos años, creciendo a un ritmo «por encima del 1%», como aclara el dueño de la misma Ariel.
Con todo, las ventas orgánicas de los dueños de estas marchas ganaron en torno a un 5% en el segundo trimestre del año, con buena presencia de Gillette o Dodot, mientras que su beneficio por acción aumentó un 14%.
Por su parte, en España estos cambios se han visto reflejados como buenos resultados, e incluso por encima de sus estimaciones, concentrando su músculo innovador, que asciende a 2.000 millones al año, y situándose en el top 10 en la combinación de ventas y rentabilidad para P&G; esta apuesta se visualiza en que se haya elevado un 10% su plantilla en el país en el último año, añadiendo 200 empleados nuevos.