Hacer frente a nuevos retos no es fácil para nadie. Aunque cada persona tiene su propia manera de asumirlos, lo cierto es que también tenemos técnicas que nos pueden resultar de ayuda. Una de las más populares es el método Kaizen, que se utiliza ya en todo el mundo tanto en el ámbito laboral como en el ámbito estudiantil, y seguro que te vendrá muy bien de cara a afrontar el emprendimiento.
Ahora lo veremos con más detalle, pero la base de esta filosofía es que para afrontar grandes retos lo mejor es introducir poco a poco en nuestra rutina pequeños cambios. Así, en poco tiempo no habremos adaptado a la situación. Una vez que sepas cómo funciona, seguro que te puede resultar de gran ayuda.
3Los principios que rigen este sistema
Si nunca has emprendido es normal que afrontar el proceso te produzca algo de miedo, puesto que son muchas las cosas que vas a tener que tener en cuenta y nadie te garantiza que tu idea vaya a ser un éxito. Este miedo es precisamente una de las principales barreras al emprendimiento, y lo que busca Kaizen es acabar con él.
Según esta filosofía, todos tenemos el poder suficiente como para poder superar el miedo. Lo que ocurre es que no lo vamos a afrontar directamente y de una sola vez, sino haciendo pequeños ajustes. Primero se da un paso, luego otro y después otro, al final poco a poco hemos recorrido una gran parte del camino.
Piensa en alguien que nunca ha hecho ejercicio y quiere empezar a entrenar. Quizá empezar asistiendo dos horas al día cinco días a la semana al gimnasio no sea lo mejor. En lugar de eso puede empezar por ir una hora un par de días a la semana, y a partir de ahí irá progresando. Pues con el emprendimiento ocurre lo mismo, no puedes pasar de 0 a 100 en un segundo.
De aquí se derivan dos principios básicos de esta filosofía. El primero es que los pequeños cambios que aplicamos se van convirtiendo poco a poco en hábitos, y el segundo es que los resultados que conseguimos son permanentes.