El día a día de los autónomos no está exento de preocupaciones. A las ya habituales se ha sumado en los últimos meses el coronavirus, y con la situación tal y como está son muchos los que se preguntan si de verdad merece la pena volver a retomar su actividad. Este es un pensamiento que cada vez se extiende más entre los profesionales por cuenta propia de más edad.
Lo habitual es que para el autónomo el momento de la jubilación no sea sencillo de afrontar. Son realmente pocos los que han cotizado lo bastante como para poder disfrutar de un retiro dorado y vivir sin preocupaciones. En la mayoría de los casos un autónomo cobra una pensión de jubilación de entorno a 700 €, por lo que no es de extrañar que muchas veces estos profesionales prefieran seguir trabajando. Sin embargo, ahora hay muchos más autónomos planteándose una jubilación temprana.
3Abrir ahora tiene más desventajas que ventajas para los autónomos mayores
Con todo esto está claro que volver a la actividad supone más desventajas que ventajas para aquellas personas que llevan toda su vida trabajando y a las que solo les faltan unos años o incluso unos pocos meses para poder retirarse y dedicarse a disfrutar de la vida.
Aunque parece que el comercio se recupera poco a poco, las previsiones no son nada halagüeñas. España va a ser uno de los países más afectados por la crisis económica derivada de la Covid-19, y está claro que todo aquel que tenga un negocio va a ver reducidos sus ingresos. Es decir, que ahora mismo los autónomos tienen menos ingresos y más gastos.
Un panorama muy complicado que hace que quienes ya tienen una cierta edad no tengan ninguna gana de afrontar los retos que están por venir y se planteen poner fin a su vida laboral y acceder ya a la jubilación, aunque esto les suponga perder algo de dinero en su prestación. Y es que, en líneas generales, a muchos les sale más a cuenta cobrar menos jubilación que afrontar pérdidas y gastos en los años que les quedan hasta la edad legal de retiro.