Lo peor de la pandemia, el dolor de los afectados y fallecidos y la incomodidad e incertidumbre del confinamiento, pasará a la historia. Sin embargo esto no sólo no ha acabado al menos hasta que haya una vacuna, con la «nueva normalidad» y el peligro de rebrotes que ya se están produciendo. A todo esto hay que añadir las secuelas de los que ya han pasado la enfermedad. Cicatrices, agujeros…, son las marcas del coronavirus que aterrorizan y deberían al menos de servir como aviso para extremar las precauciones.
También veremos las consecuencias psicológicas que conlleva pasar la enfermedad. El virus no ha sido eliminado, aún es posible contagiarse, aunque poco a poco se pueda volver a salir a la calle, es recomendable hacerlo lo menos posible, y siempre con la seguridad por delante. Si quieres saber cuáles son las secuelas a las que se tienen que enfrentar a partir de ahora los pacientes recuperados del coronavirus, solo tienes que seguir leyendo.
2Las otras marcas de la batalla
No sólo como consecuencia del coronavirus el cuerpo te deja esas marcas. El propio tratamiento, por su duración y dureza, ha dejado y deja en los pacientes que lo superan cicatrices, agujeros y todo tipo de «recuerdos» del sufrimiento. Algunos de ellos se han fotografiado con tales secuelas para concienciar a la población sobre el extremar la prevención sobre todo con el correcto uso de las mascarillas.
Un ejemplo es una foto que colgó Josep Oriol en Twitter, donde se aprecia claramente un terrible agujero consecuencia del necesario uso del respirador para poder salvarse.
Un tweet que se hizo viral y obtuvo respuestas de apoyo y de concienciación para evitar nuevos contagios.