Las nuevas acciones de Telefónica emitidas en la ampliación de capital por valor nominal de 136,3 millones de euros destinada al pago del dividendo flexible comenzarán a cotizar el próximo martes 14 de julio, dos días antes de los previsto inicialmente.
En un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Telefonica informa de que ya ha llevado a cabo la inscripción en el Registro Mercantil de Madrid de la escritura de aumento de capital con cargo a reservas relativo a la retribución al accionista mediante scrip dividend.
La operadora prevé que las nuevas acciones queden admitidas a negociación en las cuatro Bolsas de Valores españolas y sean contratables a través del Sistema de Interconexión Bursátil Español el próximo 14 de julio de 2020, de modo que su contratación ordinaria en España comience el 15 de julio de 2020, «es decir, dos días antes de lo previsto inicialmente».
Asimismo, también comunica que se solicitará la admisión a cotización de las nuevas acciones en las restantes Bolsas de Valores extranjeras en las que cotiza Telefónica, la Bolsa de Nueva York (NYSE) y la Bolsa de Valores de Lima (Perú).
SEGUNDO TRAMO
La junta general de accionistas de Telefónica aprobó el pasado 12 de junio la propuesta del consejo de administración para el pago del segundo tramo del dividendo de 2019 (0,2 euros, que se abonó en junio 2020) y del primer tramo del dividendo de 2020 (0,2 euros, que se pagará en diciembre 2020) mediante la modalidad de dividendo flexible voluntario.
Los accionistas titulares del 63,01% de los derechos de asignación gratuita de Telefónica optaron por recibir en acciones el primer tramo de este dividendo flexible, lo que supone la emisión de algo más de 136,3 millones de acciones, correspondientes a un 2,63% del capital social.
Como consecuencia de esta ampliación, la cifra del capital social de Telefónica ha quedado fijada en 5.328.437.672 euros, dividido en un total de 5.328.437.672 acciones.
Por su parte, el 36,99% restante se decantó por percibir los 0,20 euros en efectivo, lo que supone un importe bruto abonado por la compañía de más 370,7 millones de euros. La empresa renunció a los derechos así adquiridos, que han sido amortizados.