Uno de los primeros obstáculos que debe superar todo emprendedor es conseguir la financiación que necesita para poner en marcha su proyecto. Los bancos muchas veces no son la mejor alternativa, puesto que suelen poner bastantes objeciones a la hora de prestar dinero a alguien para un negocio que todavía no está en marcha y cuya rentabilidad es toda una incógnita.
Pero eso no quiere decir que debas resignarte. Existen otras alternativas de financiación, y en esta ocasión te queremos hablar de las líneas ENISA, para las que además ya se ha aprobado la edición de 2020, y eso a pesar de que estemos inmersos en plena crisis del coronavirus. Y es que ahora es cuando los emprendedores necesitan todavía más apoyo.
5¿Qué tipo de proyecto se puede financiar?
Lo que se busca con esta financiación es promover el desarrollo económico del país a todos los niveles, así que los proyectos que deseen optar a estos préstamos deben estar basados en un modelo de negocio que sea novedoso o innovador y que tenga clara ventaja competitiva con respecto a otras empresas que ya estén operando en el mercado.
Además, existen ciertos sectores que están directamente excluidos de las líneas ENISA, se trata del sector inmobiliario y el sector financiero. Si tu proyecto no pertenece a ellos, y es innovador, quizá te interese hacer tu solicitud de préstamo para que la evalúen los expertos y decidan si tienes o no derecho a ella. No obstante, si tu petición es denegada, ENISA tiene muchas otras líneas de financiación, así que puedes probar con ellas.