Son muchas las personas que prefieren acabar su vida laboral antes de llegar a la edad legal de jubilación, a fin de poder librarse por fin de las obligaciones propias de quién tiene que ir a trabajar todos los días. Por eso, junto a figuras como la jubilación anticipada existen otras que también permiten el retiro antes de tiempo, es lo que conocemos como prejubilación.
Ahora que estamos en una situación difícil y muchas empresas no saben cómo afrontar la vuelta a la normalidad y se ven obligadas a hacer ajustes en su plantilla, las prejubilaciones vuelven a estar de moda. Con ellas, los empleados de mayor edad se retiran del mercado laboral y la empresa tiene un coste menos que asumir. Si tu empresa te ha propuesto una prejubilación o valoras pedirla, presta atención a todo lo que tienes que saber sobre este tema.
4¿Vas a cotizar si estás prejubilado?
Ya sabes que si optas por esta modalidad para dejar de trabajar antes de tiempo vas a recibir mensualmente la cantidad que hayas acordado con tu empresa, que siempre será inferior a la que cobrarías si siguieras acudiendo a tu puesto de trabajo. Ahora bien, ¿en qué situación legal quedas, sigues cotizando?
A todos los efectos legales un prejubilado es un trabajador en activo, puesto que sigue cobrando de una empresa, por eso debe cotizar. Lo que suele ocurrir en estos casos es que la empresa negocia un convenio especial con la Seguridad Social. De este modo, la empresa te paga a ti una cantidad igual a lo que debes cotizar y eres tú quien debe hacer el ingreso en la Seguridad Social cada mes.
Es decir, que la empresa abona indirectamente tus cotizaciones. Por lo que podrás acceder, si así lo necesitas, a prestaciones de incapacidad y, en el futuro, a una prestación de jubilación. En algunos casos es posible que consigas que tu empresa te siga haciendo aportaciones a un plan de pensiones mientras estás prejubilado, lo que te ayudará a ahorrar de cara al momento de la jubilación.