La palabra ‘campechano’ ha sido la que más ha definido a Juan Carlos I durante gran parte de su reinado. Prácticamente se ha apropiado del término, si buscamos ‘campechano’ en el diccionario, aparecerá la foto del rey emérito. Ha protagonizado momentos graciosos en los que se ha mostrado cercano al pueblo, sin la distancia y la seriedad que exigen el protocolo, y esto se ha ganado la simpatía de los españoles. La cuestión es que mientras, de puertas para afuera, bromeaba sobre su fractura de cadera, aceptaba las gafas de ‘Caiga quien caiga’ de las manos de Gran Wyoming o lloraba como una magdalena en las olimpiadas del 92, de puertas adentro se dedicaba a hacer tejemanejes corruptos. Y al final el pueblo se ha hartado. ¿Cómo se ha llegado a este punto? Estos son algunos de los hechos que han cabreado a los españoles.
7ACOSO Y AMENAZAS
Los chivatazos de la aristócrata danesa tuvieron consecuencias, y comenzó a ser acosada por parte del Centro Nacional de Inteligencia, con el propósito de conseguir toda la documentación que Corinna poseía y que comprometía directamente a la Casa Real. La empresaria confiesa que sufrió acoso y amenazas, y que además hubo varios asaltos, a su despacho y su propio domicilio. Todo esto estaría orquestado por Félix Sanz Roldán, el exdirector de los servicios secretos, y por el propio Juan Carlos I.