Ester Expósito se ha convertido en toda una revolución. Pocas son las famosas españolas que han conseguido llegar a sus cifras astronómicas contando tan solo con 20 años. La serie que le ha otorgado la fama mundial ha sido Élite. Gracias a ella, la madrileña ya cosecha millones de seguidores en la popular red Instagram. Y es que su rostro tiene algo que engancha tanto dentro como fuera de la pantalla.
Pocas celebridades se encuentran a su nivel, lo que hace que las marcas se la rifen. En poco tiempo, se ha dado a conocer como una de las actrices más famosas del momento. Sin embargo, su vida no empezó con la popular serie, sino que ha tenido que irse labrando un hueco en este mundo a golpe de trabajo duro. El esfuerzo parece haber dado sus frutos y ahora ella se encarga de cosechar su propio éxito.
Tenemos la prueba definitiva de los primeros trabajos de la joven, que se han hecho virales estas semanas en redes sociales. Así ha sido la evolución de Ester Expósito y la de los anuncios que la catapultan.
2El anuncio que ahora es viral
La última información que se ha tenido sobre la intérprete de Élite ha sido clave para entender los inicios en la profesión. Se trata de un anuncio que, después de muchos años, se ha vuelto a hacer viral. Comenzar en el mundo de la interpretación en duro y, por tanto, muchos actores intentan ir haciéndose un hueco participando en diversos proyectos publicitarios. Ese anuncio que hace tiempo grabó para la televisión, ahora es lo más comentado en redes sociales.
Según cálculos de sus seguidores, en este trabajo Ester Expósito contaba con tan solo 17 años de edad. En esa época, poca gente confiaba en que se fuera a convertir en lo que es hoy en día, tan solo 3 años de trabajo después. En el spot aparece sentada en un banco comiendo pipas junto a un grupo de chicos de su edad. Es el anuncio de una popular marca: Pipas Grefusa.
En él podemos ver a una Ester muy aniñada, peinada con una larga trenza y sin apenas maquillaje. El estilismo también es muy sencillo: pantalones y chaqueta vaquera. Todo el protagonismo, como es lógico, se lo lleva el producto que se publicita y se aleja mucho de cómo la podemos ver en la actualidad, cuando la protagonista es siempre ella.