Unos 2.500 autobuses de transporte discrecional, esto es, escolar y turístico, se han manifestado este miércoles por el centro de Madrid y otra treintena de ciudades españolas para pedir al Gobierno ayudas para paliar el impacto de la crisis en su negocio.
«Necesitamos una serie de ayudas concretas, y de forma rápida, porque las empresas no pueden aguantar más afrontando pagos e impuestos sin registrar ingresos, con lo que se pueden ver abocas a una cascada de concursos de acreedores en el sector», indicó el presidente de Direbus, la patronal del ramo, Alfonso Taborda.
Entre las medidas que reclaman figura la posibilidad de aplazar el pago de las cuotas del ‘leasing’ de los vehículos y que los ERTEs tengan flexibilidad para poder rescatar de ellos a trabajadores en el momento en el que se les necesite.
También reclaman que se modifica la norma legal que impide realizar en la Península transporte escolar con autobuses de más de 16 años de antigüedad, «ante la imposibilidad de realizar nuevas inversiones en vehículos».
El sector entregó un documento con estas demandan en la sede del Ministerio de Transportes y Movilidad en Madrid, donde concluyó la marcha de autobuses que llevaron a cabo en la capital, una de las más numerosas dado que participaron unos 150 vehículos.
Este segmento del transporte por carretera asegura tener su principal fuente de ingresos en el turismo extranjero y en los congresos y ferias, actividades totalmente paralizadas desde que a mediados de marzo se decretó el estado de alarma para combatir la crisis sanitaria.
NO VEN RECUPERACIÓN HASTA 2022
De esta forma, descartan que su negocio se recupere hasta, al menos, 2022, a pesar de la previsible vuelta a la actividad en los colegios en septiembre, puesto que este transporte apenas supone el 30% del total de su negocio, según detalló el presidente de Direbus.
El sector del transporte en autobús discrecional y turístico está compuesto por 3.000 pymes, el 80% de las cuales tienen carácter de empresa familiar.
Las manifestaciones, que tuvieron lugar entre las 11.00 y las 13.00 horas de este miércoles, además de en Madrid tuvieron lugar en otras treinta ciudades, entre ellas, Albacete, Alicante, Badajoz, Barcelona, Cáceres, Cádiz, Castellón, Ciudad Real, Córdoba, País Vasco, Granada, Jaén, León, Madrid, Málaga, Murcia, Oviedo, Pamplona, Sevilla, Tarragona y Valencia.