Como autónomo puedes trabajar en muchos sectores diferentes desarrollando actividades muy variadas. Pero, con independencia de a lo que te dediques, una parte fundamental de tu actividad será el trato con clientes. Esto puede ser un auténtico placer o convertirse en toda una pesadilla, por eso, conviene que conozcas los perfiles más habituales de consumidor.
Si trabajas por tu cuenta ya sabes que aquello de “el cliente siempre tiene la razón” no es aplicable en todos los casos, puesto que no siempre el consumidor está en lo cierto. Pero como profesional debes saber lidiar con los diferentes tipos de perfiles que pueden tener tus clientes. Esto te permitirá darles la mejor atención posible e incluso solucionar los conflictos de mejor manera en caso de que lleguen a surgir.
5El santo, el cliente soñado
Con esta denominación hacemos referencia a ese perfil de cliente que es realmente un bendito. Se deja aconsejar por el profesional y tiene en cuenta sus ideas y opiniones. Tiene las ideas claras sobre lo que quiere y sabe transmitirlas. Además, entiende a la perfección que puedan surgir inconvenientes.
Paga las facturas religiosamente y si ha quedado contento se puede convertir en un cliente fiel. Es, en líneas generales, una persona con paciencia y con un carácter tranquilo y dialogante. Hay pocos clientes de este tipo, pero cuando das con ellos puedes tener por seguro que los vas a recordar para siempre.