Desde que empezó la crisis del coronavirus la higiene se ha convertido en la auténtica protagonista del día a día. Si lavarse las manos siempre ha sido importante, ahora lo es todavía más para evitar contagios. Pero hay lugares y situaciones en las que no podemos recurrir al agua y jabón, por lo que tenemos que buscar alternativas como el gel hidroalcóholico.
En los pasados meses de marzo y abril encontrar este producto era prácticamente imposible, estaba agotado en todos los sitios y si lo encontrabas era a precios desorbitados. Sin embargo, la situación ya se ha calmado y a día de hoy encontramos este desinfectante incluso en el supermercado de al lado de casa. Aunque es muy práctico, no deberías abusar de él, vamos a ver las razones.
2El gel hidroalcohólico reseca la piel
Seguramente ya lo habrás notado. Cuando aplicas el gel hidroacohólico notas una sensación de frescor, pero si aplicas este producto muchas veces al día sobre la piel al final notas que se va quedando deshidratada, y el problema se agrava todavía más en personas que ya de por sí tienen tendencia a tener la piel seca o algún problema tópico.
Lo mejor para evitar esta situación es moderar el uso de los geles desinfectantes y aplicar después de los mismos una buena crema hidratante, así le devolvemos a la piel esa capa de protección que el gel se ha podido llevar. Eso sí, no basta cualquier crema hidratante, hay que usar una de calidad.