En el escenario actual de la pandemia, quienes integran una posible cadena de transmisión del virus, deben adaptar su formación a las nuevas exigencias. Estar informado, capacitado y actualizado con las medidas de prevención, es la mejor forma de evitar su propagación e incrementar las posibilidades de empleabilidad.
Obtener un certificado de manipulación de alimentos, nunca ha sido tan necesario como ahora.
Aunque la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) sostiene que no hay indicios de transmisión del covid-19 en alimentos, algunas teorías afirman que posiblemente la infección inicial haya sido causada por consumo de carne animal y que por lo tanto, es necesario adaptar e incrementar todas las medidas que minimicen el riesgo de contagio obteniendo.
Las personas que trabajan en el sector alimentario han sido soldados incansables en esta batalla, pero se les pide un esfuerzo más: la formación adecuada para responder con idoneidad a las nuevas exigencias en materia de manipulación de alimentos.
Por ello, un título de manipulador de alimentos que incluya las medidas de prevención específicas para covid-19, será cada vez más demandado.
Online, legal y asequible
El Real Decreto 109/2010, exige que todas aquellas personas consideradas como manipuladores de alimentos tengan la formación necesaria para garantizar la seguridad de los mismos. “Se traslada la responsabilidad en materia de formación desde las administraciones competentes a los operadores de empresas alimentarias, que habrán de acreditar, en las visitas de control oficial, que los manipuladores de las empresas han sido debidamente formados en las labores encomendadas”, reza la norma.
Pero en las particulares circunstancias que vivimos por la pandemia mundial del coronavirus, no solo es una obligación legal sino también una responsabilidad moral enfatizar las medidas de seguridad e higiene alimentaria.
Afortunadamente, existen cursos que permiten obtener certificados 100% legales y emitidos por academias de formación españolas, en los cuales no es necesario pagar hasta no haber completado el curso. Sólo se abona una suma módica para recibir el certificado al instante en PDF o por correo postal.
En este marco, es muy importante elegir a una academia consolidada y con garantías, evitando caer en manos de falsas instituciones u organizaciones que brindan un carnet gratis pero carecen de valor ante posibles inspecciones de trabajo ya que en definitiva, será tiempo y esfuerzo desperdiciado.
Otras ventajas de la formación online
Algunas academias que cumplen lo estipulado por la ley y son un referente en el sector, ofrecen acceso gratuito al material formativo, sin necesidad de registro previo.
Otro aspecto a tener en cuenta es formarse en centros que brinden soporte telefónico en todo momento y en castellano, lo que sin dudas es una gran ventaja a la hora de realizar consultas y resolver dudas.
Dada la inmediatez con que suelen necesitarse este tipo de carnet, es posible solicitar su envío a casa u obtener una copia en PDF en el momento, lista para imprimir y presentar.
Y por supuesto, el principal beneficio de toda formación online que reviste especial importancia en tiempos de aislamiento preventivo: acceder a ella las 24 horas del día, los 365 días del año, desde casa.
Cómo se incluye la prevención del covid-19 en los programas
Las academias especializadas en este tipo de certificados y carnets, han destinado parte de su programa formativo a dar respuesta a las nuevas y especiales exigencias para prevenir el contagio del virus covid-19.
Hemos tomado como referencia el programa actualizado para manipulador de alimentos de Coformación. “Parece sensato extremar las medidas de precaución hasta que la ciencia esclarezca todas las incógnitas de forma inequívoca”, explican desde dicha academia. “Mientras tanto, ya disponemos de una serie de medidas que podemos aplicar para reducir las posibilidades de contagio”, agregan.
Una de las lecciones del curso, está dedicada específicamente a las medidas relacionadas con los trabajadores y su entorno, así como aquellas vinculadas al trabajo con alimentos.
Con respecto a los trabajadores, se hace énfasis en aprender a reconocer los síntomas de la infección, intensificar las medidas de higiene personal, cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar y otros protocolos aplicados a las tareas de un manipulador de alimentos.
En relación al manejo de productos alimenticios, la lección formativa apunta a tener especial cuidado con los alimentos no envasados, desinfectar con frecuencia las superficies y los utensilios, cambiar de guantes antes y después de tocar la comida, ofrecer a los clientes una solución hidroalcohólica para la higiene de manos, etc.
Ante la duda, extremar precauciones
Tal y como hemos mencionado anteriormente, la EFSA ha indicado que no hay indicios de transmisión del covid-19 en alimentos.
Sin embargo, durante los primeros meses de la crisis sanitaria, pruebas de laboratorio confirmaron su posibilidad de supervivencia desde algunas horas hasta varios días fuera de un huésped humano.
Además, se ha demostrado que el coronavirus es altamente estable a la temperatura de 4ºC de las neveras utilizadas en gastronomía y restauración, pudiendo llegar a sobrevivir hasta dos semanas.
Es por ello que todas las prácticas propias de un manipulador de alimentos deben adaptarse a los protocolos más estrictos y, sin dudas, constituyen un aprendizaje fundamental para cualquier trabajador del sector.
Mejor preparados para las futuras oportunidades
Si bien es cierto que la hostelería, gastronomía y restauración son los eslabones más golpeados de la cadena productiva, también es cierto que serán los sectores que más rápido salga a flote en cuanto las condiciones y regulaciones sanitarias lo permitan.
Ante esta realidad, es muy factible que aumente la demanda de personal especializado en las nuevas prácticas higiénicas de alimentos. Para entonces, los empleadores exigirán la certificación específica para facilitar el desarrollo de las funciones de un manipulador de alimentos en tiempos de covid-19.
En síntesis, se recomienda aprovechar este tiempo para mejorar la formación en manipulación de alimentos y así, poder aprovechar las primeras oportunidades que se presenten.