Uno de los principales problemas de ser autónomo es que debes ser tú mismo quien asuma todos los gastos de tu actividad. Hay obligaciones económicas en las que difícilmente puedes ahorrar, como en la cotización a la Seguridad Social. Sin embargo, si hay algunas partidas de gastos que puedes reducir si le dedicas un poco de tiempo a investigar cómo hacerlo.
Para un profesional que trabaja por cuenta propia su teléfono móvil es casi una extensión de él mismo. No es nada raro encontrar al autónomo hablando por teléfono o usándolo para navegar por Internet. Este uso excesivo es el que muchas veces hace que la factura acabe siendo más alta de lo esperado. Es cierto que es un gasto deducible, pero eso no implica que no haya que buscar alternativas para ahorrar.
3Usa formas de comunicación gratuitas
No siempre es necesaria una conversación telefónica para comunicarse con otros. Si necesitas hablar con un cliente o un proveedor, pero es un tema muy puntual, si recurres al móvil vas a tener que pagar el coste del establecimiento de llamada y los minutos que estés hablando. Además, al haber realizado una llamada es posible que pases al teléfono más tiempo del esperado, porque seguro que surgen otras cosas que comentar.
La clave aquí está en usar otros medios de comunicación que sean gratuitos. Si es algo muy puntual puedes mandar un WhatsApp a la persona con la que quieres comunicarte. Por el contrario, si necesitas tratar un tema extensamente, puede ser más sencillo y económico acordar hora y día para realizar una videollamada a través de Skype o aplicaciones similares.