El coronavirus ha cambiado muchas cosas en nuestra vida cotidiana e incluso en nuestra forma de trabajar, así que no es descabellado pensar que también va a cambiar los hábitos y las necesidades del consumidor. Algunos cambios ya los hemos ido viendo en las últimas semanas y otros están por llegar, pero tenemos que adaptarnos.
Un consumidor más precavido, más dispuesto a consumir producto patrio y que combinará sus compras online con las compras de proximidad son algunos de los rasgos más significativos de esta época que acabamos de empezar. Es momento de repasar todos los cambios que han llegado o están por hacerlo.
6La seguridad como imagen de marca tras el coronavirus
Todos los establecimientos abiertos al público están obligados a adoptar unas medidas de seguridad para reducir el riesgo de contagio, y esto ha cambiado tanto la forma de trabajar cara al público como la forma en la que los consumidores se comportan. Sin embargo, los negocios le pueden sacar partido a esto.
Aplicar correctamente las medidas de seguridad es una forma de volver a recuperar la confianza de los clientes e incluso de ganar ventaja competitiva. Si el cliente entra en un establecimiento y encuentra a su disposición gel hidroalcohólico e incluso mascarillas, si puede desinfectar sus zapatos, o ve al personal de limpieza en acción, tendrá más incentivo para volver a ese local antes que ir a uno en el que no se percibe esa sensación de protección.