El verano y la diabetes no son buenas compañeras. Cuando llega esta época del año intentas aprovechar al máximo tus horas libres y puedes llegar a descuidar tu alimentación.
Las salidas nocturnas, las comidas en la playa y las reuniones con amigos suelen darse más cuando es verano. No por ello tienes que dejar de tomar las medidas pertinentes para tu diabetes.
La diabetes no toma vacaciones, no se para el tiempo porque tú quieras. Debes de recordar que se trata de una enfermedad crónica con la que vivirás el resto de tu vida, te guste o no. En tu mano está hacerlo más llevadero.
A continuación, te diré los motivos por los que puedes incluso a llegar a poner en riesgo tu vida en verano si dejas que la diabetes se te descontrole.
8No olvides
No es necesario que pases hambre, porque eso también te supondría un problema. Tienes que saber comer con la cabeza y no con el estómago. Recuerda que si comes más de la cuenta debes hacer deporte para bajar la glucosa y que tu diabetes no se dispare.
El calor es sinónimo de que se te descontrole la glucemia. Debes tener a mano bebidas que tengan azúcar por una posible hipoglucemia y también galletitas saladas, que tienen mucha azúcar, por si es hora de comer y no tienes dónde.
Es muy importante si vas a viajar que lleves el informe médico. Además de llevar tu chapa identificativa avisando que padeces diabetes. En el historial clínico debe especificar el tratamiento que usas por si vuelas y que en el aeropuerto no te pongan pegas a la hora de llevarlo.