Una de las tareas más cotidianas dentro de cualquier hogar es poner la lavadora. Y es que, la ropa se ensucia con mucha facilidad, especialmente si tienes niños pequeños en casa. Por no hablar de las toallas, trapos y resto de elementos de tu casa que van cogiendo malos olores y que hacen que todas las semanas tengas que lavar.
Y sí, lavar la ropa suele ser un proceso tedioso, pero hay que seguir haciéndolo nos guste o no. Además, hay que tener en cuenta que, poner una lavadora no es tan sencillo como tú te crees. Sí, si aprietas el botón correspondiente y hay detergente en la cubeta, la lavadora empezará a limpiar tu ropa. Pero, si sigues estos consejos, le sacarás el máximo partido.
Los mejores consejos para lavar tu ropa en la lavadora: trucos que no puedes dejar escapar
Hay muchos detalles que no se tienen en cuenta la ahora de poner una lavadora, y son mucho más importantes de lo que piensas. ¿El primero? Utilizar un detergente de calidad. Sí, es cierto que la diferencia entre una marca blanca y una conocida es notable, pero la diferencia se nota.
No solo nos referimos a la calidad del lavado, sino en los componentes que utilizan. No hay nada peor que una lavadora cuyos mecanismos están obstruidos por restos de detergente de mala calidad que no se disuelven como es debido. Por ello, aunque te duela en el bolsillo, utiliza siempre productos de la mejor calidad. ¿Sabes esas molestias bolitas blancas que aparecen a veces? Es por usar un detergente barato.
Otro de los fallos más habituales, tiene que ver con las toallas y trapos. En más de una ocasión, huelen a humedad. Pero la solución es mucho más sencilla de lo que crees: solo tienes que poner una taza de vinagre sobre ellas y empezar el proceso de lavado. El mal olor desaparecerá al instante.
Por otro lado, un fallo muy habitual es meter las camisas sin desabrochar los botones. Ese es el motivo por el que se acaban aflojando y, por lo tanto cayendo. La solución es bien sencilla: desabrocha los botones antes de meter una camisa en la lavadora. Además, no hay que recordarte que sigas las indicaciones. ¿Lavas las prendas de algodón con agua caliente? Sufrirán mucho y se estropearán antes de tiempo.
Un truco típico de abuela, pero que te permitirá exprimir al máximo las posibilidades de tu lavadora, consiste en utilizar el limón para que los blancos queden más brillantes que nunca. Pon una olla con agua y rodajas de limón, mete los calcetines, pañuelos y resto de prendas pequeñas blancas y deja que hierva una hora. Luego lava con normalidad. El resultado te va a sorprender.
¿Harta de las manchas en los sujetadores y la ropa interior? Pues solo tienes que dejarlas en remojo durante 30 minutos con agua tibia y jabón suave. Luego las pones en la lavadora con un detergente con quita manchas y conseguirás que tu ropa interior luzca como el primer día.
Posiblemente odies con toda tu alma planchar. El mejor truco para evitar ese esfuerzo consiste en tender la ropa nada más finalice la lavadora. Si esperas demasiado rato se arrugará cuando se haya secado.¿Ya es demasiado tarde? Mete la ropa en la lavadora con una toalla húmeda y ponla en modo centrifugar durante 15 minutos. Te sorprenderá el resultado.
Y, por último pero no menos importante: utiliza suavizante. No solo sirve para que la ropa huela mejor. También ayuda a que tus prendas duren en buen estado más tiempo. Sí, igual que con el detergente, apuesta por primeras marcas. Tu lavadora te lo agradecerá.