A medida que el mundo virtual de los videojuegos va creciendo, las posibilidades de inmersión crecen con él. Los juegos de ‘mundo abierto’ como GTA, sobretodo, permiten cada vez mayor autonomía a los jugadores dentro de los universos artificiales, que ofrecen esa increíble sensación de libertad. Durante el confinamiento, ha surgido una nueva oportunidad para explotar estos universos, de la mano de los mundialmente conocidos ‘Fortnite’ y ‘Minecraft‘.
Se trata de los conciertos online, como el que protagonizó a finales de abril Travis Scott en Fortnite, la noche de DJs con deadmau5 o Steve Aoki, también en Fortnite, o como los festivales Nether Meant y Block by Blockwest en Minecraft. De hecho, este último pasó por dificultades técnicas: reventó el servidor el 25 de abril, fecha original del concierto, motivo por el que lo traspasaron al 16 de mayo.
En estos conciertos de Block by Blockwest participaron bandas como Massive Attack, Idles, Pussy Riot, Cherry Glazerr, y volvió a reunir a multitud de personas en el universo cuadrado. Sigue siendo comentado el DJ set de Charli XCX en Nether Meant, cuando Minecraft se confirmó como un espacio en el que hacer conciertos es totalmente posible.
Sin embargo, fue el concierto de Travis Scott en Fortnite del pasado 23 de abril. El llamado ‘Fortnite X Travis Scott Astronomical Event’ reunió a 12,3 millones de personas en el colorido y surrealista mundo virtual, normalmente dedicado a la batalla. Con todo esto, hay que recordar que no solo experimentan el festival los que están dentro del juego, sino que estos eventos son retransmitidos también por canales como Twitch o YouTube.
1FORTNITE LO DEMUESTRA. «PUEDES HACER DE TODO»
Adam Arrigo, director general de Wave, una startup que busca unir tecnología con industria musical, el objetivo no es «recrear algo que podrías hacer en el mundo real» sino «valorizar» el aporte de la tecnología, recoge El Observador. «No estás limitado por las leyes de la física o de la gravedad, así que se puede hacer de todo», dijo. «Es un espectáculo visual que evoluciona hacia el surrealismo», explica Arrigo. Se trata de un punto de vista por el que no habría que mirar a estos eventos como sustituto temporal sino como una nueva experiencia rica en sí misma, dadas las posibilidades que ofrece un mundo virtual.
La puesta en escena de Travis Scott así lo demuestra. Su personaje es gigante y se mueve por el mapa como si fuera un dios. Alrededor suyo, toda clase de objetos y luces colorean el mapa.