Los conflictos entre entidades bancarias y consumidores han estado a la orden del día en los últimos años, y la batalla judicial que se ha desarrollado ha tenido como vencedores a los consumidores y usuarios. Temas como la cláusula suelo han quitado el sueño durante meses al autónomo y a los particulares, que se sentían estafados al tener que seguir pagando de más mientras el euríbor bajaba y bajaba.
Las resoluciones del Tribunal de Justicia de la Unión Europea y del Tribunal Supremo han supuesto un auténtico mazazo para los bancos, que han quedado obligados a pagar lo que habían cobrado indebidamente. Pero los autónomos no habían tenido tanta suerte y no se había reconocido su derecho a que se les devolviera lo correspondiente a la cláusula suelo que constaba en sus contratos de hipoteca de locales y establecimientos comerciales. Sin embargo, esto acaba de cambiar.
4La importancia de la sentencia del 11 de marzo de 2020 para el autónomo
El pasado 11 de marzo de 2020 se dictó una sentencia que va a cambiar la vida de todo aquel autónomo que está sufriendo las consecuencias de tener una cláusula suelo. La razón es que es la segunda sentencia en al que el Tribunal Supremo reconoce la nulidad de este tipo de disposiciones cuando el cliente es un profesional por cuenta propia o un empresario, así que crea jurisprudencia.
En este caso se ha entendido que el banco no había cumplido con sus obligaciones de transparencia. No entregó al autónomo una ficha de información personalizada ni el notario le advirtió de la existencia de cláusula suelo, de forma que el afectado no podía conocer realmente las condiciones a las que quedaba sujeto el contrato de préstamo.