Cuando se trata de poner en marcha un negocio, una de las primeras decisiones que deben tomar los autónomos es si compran una oficina o la alquilan. Son dos operaciones que tienen tanto sus ventajas como sus inconvenientes. Por eso, antes de tomar la decisión hay que meditar bien el asunto y elegir así la opción más correcta.
Está claro que es una decisión muy personal y que la compra siempre va a implicar disponer de más recursos económicos, algo que no siempre el autónomo tiene disponible. De ahí que en esta ocasión vayamos a ver con más detalle las ventajas e inconvenientes que tiene cada una de estas operaciones.
6Otras alternativas para los autónomos
A día de hoy muchos autónomos ya no se ven en la obligación de decidir entre comprar o alquilar. Cada vez hay un mayor número de profesionales que deciden buscar alternativas y entre ellas destaca el coworking. En este caso no se alquila una oficina, sino un espacio de trabajo dentro de una oficina colectiva.
Esto supone un importante ahorro de costes con respecto a un alquiler tradicional o la compra de un inmueble, puesto que no hay que pagar suministros como la luz o el agua. Pero además, implica una serie de ventajas adicionales para el autónomo como el hecho de que se pueda relacionar con otros profesionales.
Y también está la opción de trabajar desde casa. Una alternativa cada vez más usada por los profesionales digitales, pero que es cierto que no se puede usar en todos los casos, puesto que muchos autónomos necesitan además un espacio abierto al publico en el que poder atender a sus clientes.
