Crédito y Caución prevé una contracción del 5% en el Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil en 2020, poniendo fin al «modesto repunte económico» que el país registraba desde 2017, según informó en un comunicado.
El informe explica que la propagación del coronavirus en el país y las consiguientes medidas adoptadas por la Administración de Jair Bolsonaro han tenido un impacto «significativo» en la demanda interna.
«Tanto la inversión (-5%) como el consumo privado (-8%) registrarán una contracción. Por su parte, las exportaciones caerán por encima del 6% afectadas por la fuerte disminución de la demanda en China, Estados Unidos y Argentina, con la única excepción de las exportaciones de soja, en máximos históricos», apunta el texto.
Según Crédito y Caución, los principales sectores productivos registrarán un aumento «considerable» del riesgo de impago y las estimaciones de insolvencia empresarial prevén «un brusco crecimiento del 20% en 2020. En todos los sectores, las empresas dependientes de las importaciones se ven afectadas negativamente por la reciente depreciación del real respecto al dólar.
Por su parte, las proyecciones para la automoción, los bienes de consumo duraderos, la electrónica, los servicios, la construcción y el textil «se están deteriorando debido a los cierres generalizados y al aumento del desempleo, que crecerá por encima del 13%. En el sector servicios, el informe apunta que hoteles, restaurantes, bares y el turismo están sufriendo «especialmente».
El análisis resalta también que la industria del petróleo y el gas, que ya se encontraba en una posición difícil antes de la pandemia, está sufriendo a causa de la caída de los precios del petróleo, añadiendo que el deterioro de la demanda tiene un efecto en cadena sobre la maquinaria, la metalurgia y el acero.
DÉFICIT FISCAL SUPERIOR AL 10%
Por otro lado, el informe afirma que, debido a las medidas de apoyo a la economía adoptadas por el Ejecutivo brasileño, se prevé que el déficit fiscal, que era «la principal debilidad económica» del país antes de la propagación del brote vírico, supere el 10% del PIB en 2020, elevando la deuda pública acumulada por encima del 90% del PIB.
No obstante, Crédito y Caución apunta que «la inmensa mayoría de la deuda se financia internamente (87%) en moneda local (95%), lo que mitiga el riesgo de impago soberano. Crédito y Caución prevé que Brasil mantenga una situación financiera externa sólida, manteniendo bajos los riesgos de transferencia y convertibilidad».