Las bebidas energéticas se han puesto de moda y son un reclamo para aquellos que necesitan una recuperación rápida tras un esfuerzo, evitar el sueño, mitigar una resaca o conseguir esa energía extra para poder afrontar un día o una noche de trabajo o de diversión. Pero no nos damos cuenta que la naturaleza es sabia y no necesita de aditamentos como la vitamina B12 y menos aún de mezclar componentes que, al contrario de lo que creemos o nos venden, resultan contraproducentes. Mezclar refrescos y alcohol no es bueno.
Tampoco la mezcla de alcohol y bebidas carbonatadas son la mejor opción, si es que hay alguna buena. El consumo de alcohol, salvo la ingesta moderada de cerveza o vinos, nunca es bueno para el organismo, pero de tomarlo es mejor solo o con agua y no añadiendo el refresco. Es España es más común que en otros países y todo ello tiene unas razones médicas y unos perjuicios.
2Riesgos de mezclar alcohol con refrescos
El de «echar gasolina al fuego» encaja con esta situación. La idea establecida de mitigar o diluir los efectos del alcohol al mezclarlos con refrescos, y más si son light, es totalmente falsa. Marczinski y Dennis Thombs, del centro de ciencias de la salud de la University of North Texas, realizaron un estudio con 16 participantes, ocho mujeres y ocho varones. Se les suministró de forma aleatoria la misma cantidad de alcohol combinado con una bebida azucarada, con un refresco sin calorías o un placebo. La concentración en el alcohol fue mayor en los que lo tomaron con refresco. La explicación es que el azúcar retrasa la absorción del alcohol en la sangre.