¿Alguna vez has pensado a qué huelen los famosos? La colonia de personajes reconocidos como Jorge Javier Vázquez, Felipe VI o Adara Molinero es algo que pude que tengamos en mente pero que parece complicado de averiguar. Pues bien, queremos desvelar el secreto.
Mucho es lo que dice un perfume de quien lo lleva. Dependerá de sus notas y su frescura. ¿Crees que al rey le gusta oler suave o apuesta por olores más contundentes? Sea como sea, lo cierto es que la colonia que usen cada uno de ellos refleja muy bien su personalidad. No por nada es uno de los elementos a tener en cuenta incluso en la comunicación no verbal.
Estilo clásico, tintes más modernos… Cada uno de ellos sabe hacerse sentir a través de su perfume. Descubre la colonia que usan personajes como Jorge Javier Vázquez, el rey Felipe VI y Adara Molinero en su día a día o cuando salen en televisión.
2Así huele el rey Felipe VI
Fue en Arco donde se descubrió el perfume que lleva el mismísimo rey de España. En contra de lo que muchos puedan pensar, al parecer la fragancia de cabecera del monarca no es otra más que Dark Blue, de Hugo Boss. Sí, un perfume que está al alcance de todos. De hecho, sería un regalo de la reina Letizia a su esposo, siendo la que utiliza en la actualidad. Misterio resuelto.
Este perfume huele muy bien y creemos que le pega mucho a Felipe VI. Es uno de los perfumes de hombre más vendidos, por lo que no nos extrañaría que compartiera fragancia con el presentador Jorge Javier Vázquez. Con notas cítricas como la lima, la naranja o el pomelo, destacan también otras como el cardamomo, el jengibre o la salvia. ¿Sus notas de fondo? El vetiver, el cedro, el pachulí y la vainilla. Sí, es una colonia fresca, pero de esas que se te quedan impregnadas durante una larga jornada.
Parece cada vez más claro que nuestros reyes son unos fanáticos de la belleza y el cuidado corporal. Siempre impecables, ambos parecen compartir también gustos en materia de perfumes. Y es que, viviendo con una fanática del ejercicio y la belleza como Letizia, es complicado no caer rendido ante los encantos del cuidado personal.
