Durante un Estado de Alarma de casi dos meses, nuestros coches, al igual que comercios y empresas, han permanecido en cuarentena. Los atascos han desaparecido y la contaminación ha disminuido considerablemente. Muchos de los vehículos que no se han utilizado para ningún tipo de desplazamiento llevan parados varias semanas, lo cual puede ser perjudicial para su funcionamiento. Dependiendo del tipo de coche, no tiene por qué pasar nada por permanecer sin uso durante un tiempo, pero ahora, que comenzamos a volver a una nueva normalidad, es conveniente revisar algunas cosas antes de coger el coche.
1BATERÍA
Si no hemos arrancado el motor en mucho tiempo y el coche tiene algunos años de antigüedad, es posible que la batería se haya descargado. Para periodos largos sin uso, se recomienda desconectar el borne positivo (el del cable rojo) con una llave inglesa. El problema es que en ocasiones puede provocar algunos fallos eléctricos cuando se vuelva a conectar y encender el coche. Si nos hemos quedado sin batería tenemos tres opciones para ponerle solución:
- Desmontar la batería y llevarla a un taller para que la recarguen.
- Pedir ayuda a otro conductor para recargar la batería con la energía de otro coche por medio de unas pinzas de cocodrilo.
- Llamar al seguro. Si ofrece un servicio de asistencia en carretera, podrán cargar parcialmente la batería para que arranque el vehículo.