Las constructoras tienen clara su estrategia: rotar activos maduros para conseguir recursos y acometer nuevos proyectos. Desde ACS, pasando por Ferrovial, o Sacyr, la maniobra está más presente que nunca. El poner en práctica el dicho de ‘renovarse o morir’ les está dando resultados. Entre las tres, suman más de 600 millones de euros de plusvalías conseguido gracias a esta forma de actuar.
El último movimiento ha sido el desarrollado por ACS. La compañía a los mandos de Florentino Pérez ha cerrado la venta al fondo Hermes del 74% de la participación en las seis autovías que tiene de ‘peaje en sombra’. El montante de la operación ha sido de 950 millones de euros.
Las plusvalías se utilizan para conseguir recursos, acometer nuevos proyectos o reducir deuda
ACS seguirá manteniendo el 26% restante respecto a las seis carreteras. Gracias a la operación, la constructora consigue una plusvalía de 40 millones de euros. De esta manera, el grupo suma además una importante inyección de recursos.
La participación de la constructora en cada una de las concesiones no es simétrica. En total, suman 234 kilómetros de longitud. Y varía entre el 63,3% de la Autovía de los Pinares (Castilla y León), y el 100% que controla en dos vías catalanas: Eje Diagonal y Reus-Alcover. Las otras autovías son de Castilla la Mancha (Autovía de la Mancha), otra de Navarra (Autovía del Pirineo), y otra en Galicia (Santiago-Brion).
ACS NO ESTA SOLA
Más allá de ACS, y si retrocedemos en el tiempo, fue en febrero de 2020 cuando Sacyr completó la venta del 95% de la autopista AP-46. Fue Core (del fondo Minova) quien se hizo con el 47,5% del activo. Este movimiento significó para la entidad presidida por Manuel Manrique unas plusvalías de 89 millones de euros. Los ingresos fueron de 455 millones, incluida la deuda asociada.
Meses atrás, concretamente en octubre de 2019, Sacyr vendió otro 47,5% del capital social de Guadalcesa (la sociedad concesionaria de la autopista AP-46 Alto de las Pedrizas-Málaga) al fondo Aberdeen. En este caso, el importe fue de 220 millones de euros. Sacyr seguirá manteniendo y gestionando el 5% de la infraestructura. Pero, gracias a esta desinversión, podrá poner el foco en crecer en concesiones fuera de España. A la par, reducir su deuda corporativa.
Por último, Ferrovial. La compañía bajo la batuta de Rafael del Pino anunció en junio del pasado año la venta del 65% de las autopistas Ausol I y Ausol II. En su caso, el comprador fue el fondo francés de infraestructuras Meridiam. Y, el importe, 451 millones de euros.
El acuerdo se firmó finalmente en diciembre. Y generó unas plusvalías para Ferrovial de 473 millones de euros. Un movimiento que permitió a la constructora desconsolidar la deuda bruta de terceros del proyecto: 611 millones de euros, de los que 531 millones son deuda neta. Ferrovial mantiene una participación del 15% en estas concesiones. Y se ha reservado una opción de venta. También puede otorgar una opción de compra a Meridiam.