Crema de cacahuete elaborada por una empresa holandesa. Tronquitos de barquillo bañados con chocolate procedentes de Alemania. Patatas fritas con sabor kétchup made in Portugal. O galletas de jengibre suecas. Estos son algunos de los productos que el jefe, como denominan en Mercadona a los clientes, se pueden encontrar en sus lineales.
Los productos procedentes de otros países no son mayoría en Mercadona. Pero, como reza el dicho, haberlos, haylos. Eso sí, en la enseña fundada por Juan Roig siempre han sacado pecho diciendo que el 85% de sus referencias son productos cultivados, pescados o elaborados en España.
Entonces, ¿qué es lo que impulsa a Mercadona a adquirir productos de otros países? ¿Cuál es el criterio que guía a la cadena a la hora de elegir unos y otros? ¿Llama directamente Mercadona a su puerta? ¿O son ellos los que, voluntariamente, se ofrecen?
Para responder a estas preguntas, lo primero que hay que tener en cuenta (así lo hace Mercadona) es que estamos en un mercado global. Pero siempre, lo que buscan en la firma valenciana, es que el producto sea nacional. Esa es una premisa esencial. ¿Qué ocurre? Que puede darse el caso de que la materia prima no abunde. Es el caso de la piña. De ahí que su origen sean Costa Rica. También hay whisky escocés, queso emmental francés, o mostaza de Dijon.
CRITERIOS DE MERCADONA
Que Mercadona acabe lanzando las redes en empresas de otros países se debe a varias causas, no sólo a la anteriormente citada. Una de las que más influencia acaba teniendo en su decisión tiene que ver con el jefe. El cliente cambia sus hábitos de consumo. El cliente cuenta con un servicio de atención donde plantea sus dudas, sus quejas, y sus deseos.
Durante el pasado año, por ejemplo, recibió más de 290.000 consultas. Fruto de ello, en 2019 se introdujeron 325 novedades en el surtido. Pero, además, Mercadona cuenta con 19 centros de coinnovación en España y Portugal en los que ha realizado 12.500 sesiones con los jefes para innovar de manera conjunta. ¿Crema de cacahuete? Es un típico producto norteamericano, muy visto en las películas. Que haya encontrado su sitio en Mercadona se debe a que sus grasas son buenas… y muy demandas por deportistas. Estos también hicieron posible que vendieran clara de huevo.
En este caso, esa necesidad de los clientes hizo que Mercadona buscase en el mercado quien podía suministrar el producto. Como se dijo al principio, una empresa holandesa se acabó llevando la palma. Pero no siempre es la enseña valenciana la que busca el proveedor. En otras ocasiones, este se ofrece mostrándole el producto que cree tiene hueco en los lineales. Es decir, que en ocasiones les llaman a Mercadona y, en otras, Mercadona los busca.
SIN REGLAS ESPECÍFICAS
No hay una regla definida al respecto. Ni tampoco un departamento en concreto dedicado a buscar ese proveedor extranjero. Los estándares que se siguen son los mismos que se si tratara de una empresa nacional. Eso sí, que nos les vendan inventos (así definen a aquellos productos que no satisfacen sus criterios). Aunque, en alguna ocasión, así ha sucedido. ¿Recuerdan haber visto un tomate frito con calcio? Pues lo hubo.
Durante la presentación de resultados, el presidente de Mercadona, Juan Roig fue muy claro: “Hoy somos 1.400 proveedores. En el futuro seremos más”. Su principal foco para encontrarlos son España y Portugal. “Si nos los encontramos, los buscaremos fuera. Estamos buscando proveedores de forma muy beligerante”, afirmó.
