Cada cierto tiempo, sale a la palestra algún nuevo superalimento. El aceite de coco ha sido uno de los más populares, y aún hoy en día se utiliza el comodín del coco para cualquier sustituto de alimentos, a priori, menos saludables. Sin embargo, a raíz de una polémica conferencia de la profesora Karin Michels, del Instituto de Prevención y Epidemiología Tumoral, se ha puesto en duda los aparentemente magníficos beneficios del aceite de coco. ¿Es realmente un engaño? ¿Puede matar? Veamos cuáles son los mitos y verdades sobre el aceite de coco, un componente que al estar de moda tiene un precio más alto.
1¿REDUCE EL COLESTEROL?
Uno de los últimos informes que hemos conocido sobre las grasas en la dieta por The American Heart Association ya advirtió que existe una falsa creencia que el aceite de coco es saludable. Error, porque el aceite de coco tiene una gran cantidad de grasas saturadas. Sí, también tiene micronutrientes, pero no reduce el colesterol. De hecho, sería más preciso decir que el aceite de coco no tiene colesterol, pero no que lo reduce. En su composición incluye activadores tanto del colesterol bueno como del colesterol malo. Así que de nuevo nos encontramos con la máxima de que hay que moderar el consumo y procurar que sea coco o su aceite sin refinar.