El autónomo que tiene empleados debe afrontar todavía más responsabilidades que aquel que trabaja por su cuenta y en solitario, puesto que puede tener que pasar por una inspección de trabajo. Un proceso que no debería provocarte estrés si todo en tu negocio está en orden, aunque no podemos negar que ver aparecer a un inspector de trabajo por la puerta siempre da un poco de miedo.
Lo primero es asumir este examen como algo totalmente natural. En muchos casos las inspecciones se hacen de forma totalmente aleatoria, así que no tienes que ver al inspector como a un enemigo, sino simplemente como un supervisor que viene a asegurarse de que todo está en orden y tanto tú como tus empleados podéis trabajar con normalidad.
5Lo que no deberías hacer nunca ante una inspección de trabajo
Tal y como decíamos antes, si muestras resistencia a la inspección llevas todas las de perder, puesto que das la impresión de estar ocultando algo. Aquí tienes una recopilación de las cosas que no debes hacer si no quieres que el inspector revise hasta el último detalle.
Para empezar no te niegues nunca a la inspección, eso sí, asegúrate de que el inspector se acredita bien para evitar posibles fraudes. No realices acciones u omisiones que puedan dificultar, retrasar o impedir la labor del profesional que realiza la inspección. Evita negarte a aportar la documentación que te pidan si no hay causa justificada para ello. No ocultes información de forma intencionada y no coacciones a tus empleados para que no colaboren con el inspector.