sábado, 23 noviembre 2024

Los secretos más desconocidos de Los Simpsons

Podríamos decir que Los Simpsons son como alguien más de la familia. Durante años, hemos comido junto a sus peripecias. Nos hemos reído con las ocurrencias de Homer, hemos apoyado a Lisa en sus iniciativas medioambientales, y vivido junto a los demás miembros. Pero, ¿podrías decir que lo sabes todo sobre ellos?

Muchas son las teorías que se han escrito a lo largo de los años. Desde su nacimiento, a manos de su creador, hasta las predicciones que, sorprendentemente, parece que siempre se hacen en una de las series más famosas y queridas de la televisión. Probablemente no nos podríamos imaginar la vida sin ellos, y es que son muchos años ya de recorrido.

Son ya treinta las temporadas que nos llevan acompañando a cada hora del día. Ahora que las podemos ver todas de seguido gracias a la plataforma Disney+, es el momento de volver a hacer un repaso. Descubre algunos de los secretos más desconocidos de Los Simpsons.

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Una versión diferente de Los Simpsons para cada país

iglesia de los simpsons

Fue tal la fama que alcanzaron en poco tiempo, que en la actualidad podemos ver Los Simpsons en todas las partes del mundo. Sin embargo, no en todos los países se presentan de la misma forma. De hecho, ni siquiera en todos conservan sus mismos nombres. Las culturas y tradiciones son muy diferentes en las diversas partes del planeta, y eso es algo que han querido respetar y reflejar en la serie.

Por ello, no dudaron en hacer algunos cambios para que los personajes se adapten a las normas y costumbres de cada país. Por ejemplo, en Oriente Medio los cambios son muy marcados. Los nombres de muchos personajes son diferentes a los originales. Homer se llama Omar Shamshoon, Bart es Badr, Marge es Mona y Lisa es Beesa.

Pero no solo los nombres han sufrido cambios. Homer es un gran bebedor de cerveza pero, en esta zona del mundo, lo que bebe es gaseosa. El bar de Moe tampoco es una taberna, sino una cafetería. Allí no se come cerdo y la familia tampoco acude a la iglesia, sino a una mezquita. Ha sido la estrategia para poder llegar a cada rincón del mundo sin que esto afecte a las costumbres de cada uno de ellos.


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