Este verano va a ser muy diferente a los anteriores, a causa del coronavirus, sobre todo en playas y piscinas. El Gobierno tiene previsto comenzar una fase de desescalada a mitad del próximo mes de mayo. Este proceso se realizará muy lenta y progresivamente, por lo que la vuelta a la normalidad queda aún muy lejos. Así que este año, las vacaciones y el verano se vivirán de una manera muy distinta. El turismo exterior está descartado por el cierre de las fronteras, y en cuanto a la movilidad dentro del territorio nacional, también habrá restricciones. Por supuesto, debemos mantener las distancias de seguridad y el uso de mascarillas. Este año, decimos adiós a las masificaciones.
Pero, ¿vamos a poder disfrutar, al menos, de las actividades típicas asociadas a verano, como ir a la playa y a la piscina? Y lo más importante, ¿qué riesgos comporta para la salud? Esto es lo que dicen los expertos.
4MAR Y PLAYA
En cuanto a las playas, los expertos también aseguran que es inviable que el virus se quede en mar y presente riesgo de contagio. El riesgo, de nuevo, son las aglomeraciones y la cercanía, a menudo inevitable, de las personas, tanto en el agua como fuera de ella. El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo todavía están definiendo los protocolos a activar en las playas españolas. Las autoridades piden que, una vez que se inicie la desescalada, debemos seguir manteniendo las medidas de seguridad actuales incluso en la playa. Lo más probable es que se limite en aforo y se obligue a mantener la distancia entre los usuarios, aunque se prevé algo complicado. De cualquier modo, todo está aún en el aire. ¿Tomaremos el sol con mascarilla, este verano?