Los niños menores de 14 años podrán pisar la calle por primera vez desde hace mes y medio, a partir del 26 de abril. De esta forma se inicia un proceso de desescalada con el que se pretende permitir un pequeño alivio a los más pequeños y también a sus familias. Las salidas estarán restringidas a una hora al día entre las 9 y las 21h y a una distancia de un kilómetro, acompañados de un adulto. No podrán jugar con otros niños, ya que la prioridad es seguir manteniendo la distancia de seguridad, pero sí podrán llevar algunos juguetes, como patinetes o bicicletas.
Para que este regreso a las calles sea responsable y seguro para todos, los niños deberán aprender cómo son las cosas ahora en el exterior. Recordemos que han pasado la cuarentena en la seguridad de sus hogares, sin preocuparse del aislamiento social o de no tocar cualquier cosa. Así que, padres y madres tendrán que explicarles cuales son las instrucciones para sus paseos diarios. Aunque los niños tienen menos probabilidades de desarrollar la covid-19, sí son vehículos de contagio y por eso es importante que se extremen las precauciones, desde que se sale por la puerta de casa, hasta que se regresa. Estos son los principales focos de riesgo fuera de casa.
1PORTAL Y URBANIZACIÓN
El primer lugar es recomendable evitar el uso del ascensor, y subir y bajar por las escaleras. Si no queda más remedio, procuraremos no compartirlo con vecinos, aunque tengamos que esperar. No dejaremos que el niño pulse los botones y lo haremos nosotros usando alguna protección. En las zonas comunes de las comunidades de vecinos es prácticamente imposible no entrar en contacto con superficies que han tocado previamente otras personas, y que pueden contener residuos de estornudos y toses, como las puertas o las barandillas de las escaleras. Para asegurarnos de mantener la higiene, deberíamos llevar con nosotros un frasco con gel hidroalcólico o bien algo de jabón y una botella con agua para lavarle las manos a los niños.