La compañía automovilística Volkswagen indemnizará con hasta 6.250 euros a unos 200.000 propietarios de vehículos diésel afectados por el caso del software que alteraba las emisiones algunos vehículos diésel de la empresa, por lo que tendrá que pagar en total de alrededor de 620 millones de euros.
Tal como ha anunciado Volkswagen en un comunicado, estos clientes recibirán entre 1.350 euros y 6.250 euros, que se pagarán a partir del 5 de mayo, debido a la pérdida de valor de sus coches por la manipulación de este elemento.
En unos 21.000 casos, la decisión final sigue pendiente. Además, se prorrogó hasta el 30 de abril el plazo para las nuevas inscripciones de reclamaciones y para la terminación de los documentos que faltaban.
«Esperamos que el número de 200.000 acuerdos aumente aún más después de las revisiones finales de numerosas solicitudes de liquidación a corto plazo», ha destacado el asesor legal de la firma, Manfred Döss.
Todo esto en el marco del acuerdo firmado a principios de este año por el consorcio alemán con la Federación de Organizaciones de Consumidores Alemanes (VZBV, por sus siglas en alemán). Este documento prevé que los consumidores afectados por el caso del diésel reciban una indemnización por la pérdida de valor de sus vehículos. El compromiso, sin embargo, solo se aplica a los conductores que se hayan unido a la demanda colectiva en el país.
«El elevado número de acuerdos alcanzados hoy demuestra que la oferta de pacto fue recibida como justa por nuestros clientes y que el camino hacia una solución individual funcionó bien», ha señalado la responsable de Asuntos Legales de Volkswagen, Hiltrud Werner.
Volkswagen admitió en septiembre de 2015 haber manipulado más de 11 millones de automóviles diésel en todo el mundo mediante la colocación de un dispositivo que disfrazaba las emisiones reales de gases.
En Alemania, el grupo aceptó en 2018 pagar una multa de 1.000 millones de euros porque las investigaciones de la Fiscalía determinaron que se produjeron «incumplimientos del deber de vigilancia».
