El autónomo asume muchos retos en su día a día, pero quizá uno de los más importantes que debe afrontar es la organización del trabajo. La planificación es esencial, puesto que sin ella el profesional se va a encontrar con que no puede completar todas sus obligaciones a tiempo y tiene que trabajar más horas de las debidas.
Existen muchas formas y medios de organización. Hay herramientas digitales que pueden ser muy prácticas en este sentido, pero también podemos recurrir a métodos que han demostrado con creces que pueden ser de gran utilidad a la hora de gestionar el tiempo de trabajo. Uno de los más usados es el método Kanban, y te lo vamos a presentar en este artículo.
1Orígenes de este método
Aunque el método Kanban se ha puesto muy de moda en los últimos años, lo cierto es que no se trata de nada nuevo. Fue ideado en la década de los 40 del siglo pasado en la automotriz Toyota, como sistema para aumentar la eficacia y la producción en la empresa. Sus efectos fueron tan positivos que a día de hoy se utiliza en todos los sectores empresariales y también puede ser muy útil para los autónomos.
Kanban es una palabra japonesa que se significa tarjeta o cartón. Esto nos permite ya entrever que se trata de un método muy visual que permite hacer una división de tareas que se van a clasificar según estén pendientes de hacer, en proceso o listas. Así se consigue un flujo de trabajo continuo y se mejora la productividad.