La cuota de autónomos es uno de los gastos fijos que deben asumir cada mes los trabajadores por cuenta propia. Para estos profesionales estar al día en sus cotizaciones es algo totalmente esencial, y es que los retrasos en los pagos no solo dan lugar a recargos y sanciones, también pueden implicar perder el acceso a ciertas prestaciones.
Puede parecer que dejar sin pagar una cuota no es algo tan grave, pero el autónomo que lo hace va a comprobar las nefastas consecuencias que esto tiene justo cuando más necesite contar con una ayuda pública. Esto es, cuando tenga que jubilarse o tenga que cobrar una prestación pública por estar de baja.
6Pérdida de la prestación extraordinaria en el estado de alarma
El estado de alarma ha llevado a muchos autónomos a tener que cerrar su negocio, y quienes continúan trabajando han visto descender sus ingresos de forma notable. Para paliar las consecuencias del confinamiento el Gobierno ha aprobado una ayuda extraordinaria para los autónomos afectados.
Se ha establecido que aquellos trabajadores por cuenta propia que estén afectados por la situación pueden solicitar la prestación por cierre de actividad. Se han eliminado los requisitos habituales del acceso a esta ayuda y en este caso no es necesario haber cotizado por cese de actividad ni tener cubierto un período mínimo de carencia.
Lo que se busca con esto es ayudar al mayor número posible de afectados. Sin embargo, hay un requisito que es indispensable cumplir: no tener deudas con la Seguridad Social. Quienes las tengan y necesiten acceder a la ayuda tienen un plazo de 30 días para ponerse al día y poder acceder entonces a la prestación por cierre de actividad.