«Abril trae flores y mayo se lleva los honores» enuncia el dicho popular. Este año, ni una cosa, ni la otra. El refranero también ha perdido vigencia a consecuencia del covid-19. Las flores se han quedado este año sin Fallas, sin Día del Padre, sin Semana Santa, sin bodas, sin cumpleaños… incluso nuestros muertos se van sin sus homenajes florales. Asociaflor-Andalucía busca el apoyo de todas las asociaciones de productores y comercializadores de flor y planta ornamental para pedir que este año se traslade el Día de la Madre a una fecha posterior e idéntica para todos los países de la Unión Europea. Las plantas y flores buscan nuevas fórmulas para brotar tras el paso del coronavirus.
En la Unión Europea (UE), países como Italia, donde casi todos los establecimientos estaban cerrados, ya se ha autorizado la venta de flores y plantas en los centros de jardinería. También está permitida su comercialización, en cadenas de alimentación y centros de bricolaje, en Alemania, Holanda, Suecia y Dinamarca, por estar consideradas bienes de primera necesidad, lo que ha permitido mantener, en parte, la actividad de los viveros de esos países.
En España, el sector agrupado en la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas vivas (FEPEX) quiere seguir los pasos de sus vecinos europeos. Las asociaciones sectoriales españolas proponen adoptar una consideración especial para sus productos, y permitir su venta lo antes posible, con el fin de mitigar las graves pérdidas económicas sufridas por el hundimiento del consumo que ha dejado el covid-19.
En concreto el sector productor y comercializador de flor y planta y los centros de jardinería han solicitado al Gobierno que, si autoriza una reapertura paulatina de la actividad económica, los centros de jardinería deberían ser autorizados de forma inmediata a vender flores y plantas, puesto que son el principal canal comercial para los productores de planta ornamental.
En estos momentos en España, los centros de jardinería están cerrados. El comercio de flores, plantas, abonos, fertilizantes y alimentos para mascotas está incluido en el listado de productos de primera necesidad no alimentarios y fue recogido en la normativa sobre medidas preventivas contra el covid-19 publicada por las Comunidades Autónomas. Sin embargo, la publicación del RD 463/2020 por el que se declaró el Estado de Alarma incluyó únicamente algunos de ellos. Es decir, se estableció una diferenciación entre las plantas de huerto y de alimentos para mascotas que sí pueden venderse, lo que permitiría la apertura de centros de jardinería, pero estos permanecen cerrados, ya que el grueso de la comercialización, que son la planta ornamental y jardinería no está autorizado.
Según datos de FEPEX, los productos del sector de flor cortada y planta viva representan un 3,2% de la producción vegetal final (PVF), con una superficie cultivada que asciende a aproximadamente 4.500 hectáreas, con un valor de la producción nacional en origen de más de 1.000 millones de euros. Las principales Comunidades Autónomas productoras son Andalucía, la Comunidad Valenciana, Cataluña, Canarias, Galicia, Aragón y Murcia. La rentabilidad social de la producción es muy elevada, dado el alto porcentaje de mano de obra que incorpora y supone alrededor de 40.000 empleos concentrados en zonas donde la dependencia de este sector es muy alta.
El segmento de las flores y plantas ornamentales representa el sector agrario más afectado por la crisis derivada del covid-19, al sufrir una caída total del consumo a nivel nacional e internacional. Este desplome del consumo supondrá la quiebra de todos los viveros y centros de jardinería existentes en España. Por ello, FEPEX ha planteado al Ministerio de Agricultura que se aprueben medidas urgentes, entre las que figuran un régimen extraordinario de retiradas del mercado y una línea de liquidez ICO para los viveros.
MEDIDAS Y COMPENSACIÓN DE PÉRDIDAS
Desde el Comité de Flores y Plantas se recuerda que el hundimiento del consumo en los hogares, los cierres de los puntos de venta, así como la anulación de fiestas tradicionales como y de eventos familiares están provocando una situación de quiebra total, sin perspectivas de recuperación en los próximos meses.
Según el secretario general de FEPEX, Jose María Zalbidea, la situación es tan grave que la mayoría de los productores de flor cortada y planta ornamental, viveros y centros de jardinería «dan por perdida esta campaña y lo único que esperan es obtener la liquidez suficiente para endeudarse y seguir la actividad los próximos meses«.
En este sentido, la organización sectorial ha demandado al Ministerio de Agricultura que se solicite a la Comisión Europea que, siendo el único sector agrario que no dispone de ayudas de la PAC, apruebe medidas especiales de gestión de la crisis, mediante un régimen extraordinario de retiradas del mercado compensadas, abierto a todas las empresas afectadas que acrediten su actividad comercializadora, a través de procedimientos administrativos ágiles que faciliten su gestión.
Asimismo, la patronal ha pedido el establecimiento de forma inmediata de una línea de liquidez ICO, similar en su contenido a la adoptada en ocasiones para otros sectores, con el fin de facilitar a los productores el tránsito a la próxima campaña.