Llega el cambio de temporada y tú seguro que ya estás pensando en un cambio de look. Si deseas hacerlo por tu cuenta, te darás cuenta de que cortarte el pelo en casa sin provocar un desastre es mucho más sencillo de lo que puedas pensar.
Lo primero que debes tener, es buena disposición. También debes conocer bien tus rasgos para saber qué te sentará bien o no. Con una idea preconcebida de lo que queremos conseguir será mucho más fácil llegar hasta la meta final. ¡Mucho mejor que no ir experimentando en el camino!
Los remedios caseros son esa solución casi mágica para prácticamente todo. También para montar la peluquería en casa. Para cortar las puntas o hacer un corte sencillo, podremos hacerlo sin problema por nuestra cuenta. Descubre cómo te puedes cortar el pelo en casa, y que quede bien, sin que tu melena muera en el intento.
4Bob o en uve para las más atrevidas
El corte bob es uno de los estilos que más se llevan desde hace años. Para poder hacerlo en casa sin problema, lo primero es mojar nuestro cabello como de costumbre. Después, échalo todo hacia atrás y cógelo en una coleta baja. Para que quede bien, corta justo por debajo de la goma. En caso de quererlo más largo, solo tendremos que hacer una coleta más baja o menos suelta.
Si lo preferimos en uve, también podremos lograrlo. Es uno de los más sencillos, a pesar de lo que pueda parecer. Eso sí, debes tener en cuenta que es un estilo que no a todos los rostros ni tipos de cabello les queda bien. Por tanto, es mejor haber realizado ese estudio previo de conocimiento para poder trabajar de forma contundente y con seguridad.
Para empezar, moja bien el pelo y coloca la cabeza hacia adelante, haciendo que la barbilla toque con el pecho. Después, peina y desenreda de forma efectiva todo el cabello, ten cuidado de que no quede ningún nudo y sea del todo uniforme. Corta el mechón central y define de este modo el largo del corte para no confundirnos. Comienza cortando en forma de pico o de uve tomando como guía el mechón que ha quedado más largo en los dos lados. Coloca bien la cabeza, péinalo como de costumbre y disfruta de tu nuevo cambio de look.