Cada vez que llega el momento de hacer la liquidación trimestral de impuestos al autónomo le entran dudas sobre los gastos que se puede deducir y aquellos que no puede incluir en su declaración. Y no es extraño que un profesional por cuenta propia le dé tantas vueltas a este tema, puesto que está sometido a una gran presión fiscal y además tiene que asumir un gran volumen de gastos en su negocio.
Sacar adelante un proyecto profesional no es nada fácil, con frecuencia requiere invertir un dinero que muchas veces no se tiene, lo que obliga a buscar financiación externa. Y a ello hay que sumarle que todo negocio lleva una serie de gastos asociados. Algunos de ellos son desgravables, pero otros no, y es importante diferenciarlos para evitar posibles sanciones por parte de Hacienda.
4Tickets y autónomo
La legislación en torno al uso de los tickets para aplicar desgravaciones ha ido cambiando a lo largo del tiempo. En la actualidad un ticket no sirve para desgravarse un gasto, no importa si se trata de un servicio de transporte o de la compra de un paquete de folios para la oficina. Este documento no contiene información sobre la identidad del comprador, por lo que no se considera válido.
Esto no quiere decir realmente que estos gastos no sean desgravables si están vinculados con la actividad profesional, sino que se no se puede aplicar la desgravación si el único justificante del gasto es un ticket. Lo que tiene que hacer el autónomo en estos casos es pedir una factura simplificada. Le costará perder algo más de tiempo en sus gestiones, pero a cambio conseguirá que Hacienda no le pueda recriminar nada con respecto a las desgravaciones que aplica.