Los remedios naturales son un clásico al que recurrimos cuando tenemos algún problema de salud que no es grave. Un poco de congestión, la típica tos molesta que no termina de irse, etc. Y si hay un alimento que es conocido por sus múltiples propiedades y típico de los remedios caseros ese es sin duda la cebolla.
Todos tenemos en casa alguna cebolla, ya que es un ingrediente muy típico en recetas de todo tipo, desde las más modernas a las más tradicionales. Y aprovechando que siempre está en nuestra cocina la podemos usar para aliviar algunos dolores y molestias que son típicos en el día a día. Vamos a verlo.
2Cataplasma de cebolla para la tos
Hay personas a las que les resulta imposible probar la cebolla, así que en este caso podemos recurrir a un remedio tan clásico y fácil de aplicar como la cataplasma a base de este ingrediente, que ayuda a reducir la irritación de las vías respiratorias y es muy útil a la hora de reducir la tos.
Lo que hay que hacer es trocear una cebolla y cocerla en agua hasta que esté blanda. Se cuela el agua y se retiran los restos de cebolla. Ahora mete un paño limpio en el agua resultante de cocer la cebolla y así caliente ponlo sobre el pecho de la persona afectada. Cambia los paños a medida que se vayan enfriando. Prueba a hacerlo unos 10 minutos antes de dormir y notarás la diferencia.